La OTAN terminó en los últimos días de diciembre de 2016 la operación Ocean Shield contra la piratería en las aguas cercanas a Somalia, señaló la organización en un comunicado.
Los barcos y aviones de la OTAN han patrullado los mares frente al Cuerno de África desde 2009, como parte de un amplio esfuerzo internacional para combatir la piratería marítima.
Ocean Shield ha ayudado a evitar o interrumpir cientos de ataques piratas. Muchos piratas fueron detenidos durante la misión y fueron procesados por las autoridades nacionales, de acuerdo con la OTAN. La actividad fue reducida de múltiples incidentes mensuales a cero en los últimos dos años.
En 2014, el Consejo del Atlántico Norte amplió su operación hasta fines de 2016.
La vocera de la OTAN, Oana Lungescu, dijo que la operación ha hecho una contribución esencial para combatir la piratería en los mares frente a las costas de Somalia. Eso ha mantenido segura una de las rutas fluviales más importantes del mundo.
“Aunque la operación concluye oficialmente, la OTAN continuará observando de cerca la situación en la región y estamos listos para reiniciar nuestros patrullajes si son necesarios”, agregó Lungescu.
La alianza estima que en los últimos años se han producido cambios importantes en la seguridad internacional y sus buques deben adaptarse a ellos. Por lo que se han intensificado las patrullas en el mar Báltico y el mar Negro, (¿para contener a Rusia?).
Al mismo tiempo de finalizar la operación Ocean Shield inauguraba la operación Sea Guardian en el Mediterráneo desplegando actividades de vigilancia, contraterrorismo, libertad de navegación, interdicción marítima. Además de apoyar a la operación europea Sophia desplegada también en el Mediterráneo para controlar a las mafias migratorias.
La Unión Europea continúa
Piratas somalíes apresados por una fragata portuguesa en 2009.
Con la operación Atalanta en diciembre de 2008 la Unión Europea decidió llevar a cabo la conducción de una operación militar marítima para contribuir a la disuasión, prevención y represión de los actos de piratería y robo a mano armada en aguas de Somalia y en la zona adyacente. Siendo prorrogada en marzo de 2012 hasta el 2014 con la misión de proteger a los buques del Programa Mundial de Alimentos (WFP).
Además, contribuir a la monitorización de las actividades pesqueras frente a las costas de Somalia.
El mandato actual terminaba el 28 de noviembre de 2016, pero el Consejo Europeo decidió extenderlo hasta diciembre de 2018. En el comunicado donde se anuncia la decisión comenta que si bien los ataques piratas a los buques que transitan el golfo de Aden y el mar Índico han sido erradicados, los piratas todavía tienen la intención y la capacidad de salir al mar y perpetrar un ataque.