Traducido y adaptado por Negro2000
La presión está claramente aumentando en los fabricantes de aviones no tripulados para controlar el vuelo no autorizado de sus productos. Sólo ayer, DJI anunció su intención de restringir severamente la funcionalidad de sus drones hasta que se registren los detalles del propietario. Pero la administración Trump está tratando de ir un paso más allá. Quiere que el gobierno federal tenga el poder de rastrear, hackear y destruir cualquier drone que vea como una amenaza.
Un proyecto de la legislación que permitiría que esa acción se tomara legalmente encontró su camino en las manos del The New York Times. Se cree que es una respuesta a un número creciente de incidentes que involucran pequeños aviones no tripulados, incluso en la Casa Blanca en 2015, en eventos deportivos y por supuesto en los aeropuertos donde representan un serio peligro para los aviones. También se menciona el potencial de su uso por los terroristas.
Si la legislación obtuviera la aprobación del Congreso, permitiría a las fuerzas del orden tomar el control de un drone por la fuerza y destruirlo si es necesario. Al mismo tiempo, “privacidad, derechos civiles y libertades civiles” tendrían que ser respetados.
En cuanto a por qué se requiere una nueva legislación, el proyecto de ley explica que las técnicas para sacar a los drones “pueden ser interpretadas como ilegales bajo ciertas leyes”, más específicamente las relacionadas con la vigilancia, la privacidad y la protección de las aeronaves. Dicha legislación también significaría que los juicios relacionados con la captura y destrucción de los drones no llegariasn a los tribunales.
El New York Times cree que el proyecto de ley forma parte de la Ley de Autorización de la Defensa Nacional, elaborada por comités de las fuerzas armadas. La ley aún no ha sido revelada públicamente, por lo que no está claro cuándo se presentará dicha legislación al Congreso.
Si estos nuevos poderes entran en la ley, uno puede esperar que toda una nueva gama de kit de captura de drones llegue al mercado para las agencias de aplicación de la ley.
Es una frecuencia de radio encriptada, los hacker ya lo hacen a distinto nivel, pero no es imposible.
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