El rompehielos Almirante Irízar ya está en la Antártida para realizar las pruebas de hielo, las últimas en el marco del tramo final de su alistamiento para volver a operar en las futuras campañas al continente blanco organizadas por el Ministerio de Defensa.
El buque se encuentra navegando por bordes y packs de hielo para poder comprobar su comportamiento y sus capacidades. Una vez finalizada esta etapa, podrá estar en condiciones de obtener la certificación final para reincorporarse a la Armada Argentina.
Luego del proceso de reconstrucción y modernización al que fue sometido en el Complejo Industrial y Naval Argentino (CINAR), se convirtió en el único rompehielos en todo el hemisferio sur dotado de tecnología de última generación, y con una mayor capacidad de trasportar gas oil antártico (GOA), además de haber incrementado en un 600 por ciento la cantidad de espacio dedicado específicamente a la investigación científica.
El rompehielos Almirante Irízar cumple la indispensable tarea de servir como transporte logístico de las campañas antárticas, pero también desarrollará actividades científicas. El rompehielos se encuentra al mando del capitán de fragata Maximiliano Mangiaterra y lleva a bordo una dotación de 111 hombres y mujeres.
Muy bien!!! de a poquito nos vamos transformando en un pais serio