En Siria, como resultado del bombardeo llevado a cabo el 3 de diciembre por el avión militar sirio con el apoyo de los aviones de guerra rusos, al menos 19 civiles fueron asesinados en el área de East Ghouta, ubicada cerca de la capital de Damasco, informa DW, citando como fuente al Centro de Monitoreo Sirio para la Observancia de los Derechos Humanos.
Según los observadores, los ataques aéreos se infligieron en varias ciudades en Ghouta Oriental. La mayoría de las víctimas de los bombardeos se encontraban en la ciudad de Hammuria, donde murieron 13 civiles, entre ellos cinco niños. Los ataques aéreos en las ciudades de Arbin, Beit-Sawa y Mesraba provocaron la muerte de seis personas más, incluidas dos mujeres y dos niños.
Según el centro de monitoreo, docenas de personas resultaron heridas como resultado de los ataques aéreos. Muchos de ellos se encuentran en estado crítico, por lo que la cantidad de muertes puede aumentar.
Se informa que la región oriental de Ghouta, cerca de Damasco, sigue siendo uno de los pocos territorios en Siria que todavía está bajo el control de los rebeldes. Esta área ha sido bloqueada por las tropas del gobierno desde 2013. Ahora hay alrededor de 400,000 personas allí, y la ONU previamente expresó su temor de que cientos de personas en Ghouta Oriental puedan morir si no son evacuadas y brindan asistencia médica inmediata.
Anteriormente, la Fuerza Aérea israelí atacó a Siria. El objetivo del ataque fue una base militar iraní ubicada a 50 kilómetros de la frontera sirio-israelí.
