El HMS Queen Elizabeth es el nuevo y radiante portaaviones de la Real Marina (Royal Navy), primero de su clase, y destinado a ser, junto con su hermano gemelo HMS Prince of Wales, los buques más grandes y poderosos jamás construidos para la Marina Real.
Ambos portaaviones nacieron bajo la bandera del proyecto “CVF Proyect”, con el propósito de reemplazar a la clase Invincible compuesta por tres portaaviones de menor capacidad de desplazamiento que habían servido durante la Guerra Fría.
La clase Queen Elizabeth constará con una capacidad de desplazamiento de 65,000 toneladas cada uno, y el HMS Queen Elizabeth ya se encuentra realizando pruebas desde mitad del presente año, pero se creé que estará en servicio a finales de esta década, mientras que HMS Prince of Wales todavía se encuentra en proceso de construcción en Rosyth y comenzaría a operar para el 2020.
La construcción de la nueva clase de portaaviones se anunció durante el 2007 pero el programa sufrió varios retrasos, incluyendo un aumento sustancial en el presupuesto inicial de 6.200 millones de libras.
El HMS Queen Elizabeth, representa actualmente, el mayor buque militar en la historia del Reino Unido dejando relucir sus imponentes dimensiones con sus 280 metros de eslora, 70 de manga, 56 de altura y una capacidad de desplazamiento que supera tres veces a los de su antigua clase, pudiendo transportar hasta cuarenta aeronaves.
“En un mundo de intensas amenazas globales, este magnífico barco será una fuerza líder que luchará para proteger los valores del Reino Unido y nuestros aliados”.
Secretario de Defensa Gavin Williamson
Asimismo se prevé que contara con una aviación embarcada de 36 aviones F-35B y cuatro helicópteros cada uno.
El HMS Queen Elizabeth se encuentra realizando pruebas de agua, y la más significativa de todas fue el ejercicio Saxon Warrior 2017 llevado a cabo en conjunto por Estados Unidos y el Reino Unido con el objetivo de demostrar la interoperabilidad y la capacidad para responder a las crisis y disuadir posibles amenazas.
Saxon Warrior 2017 contó con la participación de 60 efectivos de la Real Marina que se ocuparon de dirigir operaciones de ataque de portaaviones desde la cubierta del USS George HW Bush para practicar la llegada del HMS Queen Elizabeth.
Del ejercicio participaron también alrededor de 100 aviones, 10.000 personas y 15 buques de guerra de cinco naciones de la OTAN, y el mismo tuvo lugar frente a las costas de Escocia.
Andrew Betton, comandante del grupo británico Carrier Strike, comentó sobre el ejercicio Saxon Warrior y dijo que “Mientras nos preparamos para dar la bienvenida al HMS Queen Elizabeth a Portsmouth por primera vez, el Saxon Warrior 2017 ha ofrecido una oportunidad sin igual para que la Real Marina ensaye la coordinación de varios barcos, aviones y submarinos que formará el Carrier Strike Group del Reino Unido”.
El HMS Queen Elizabeth, fue sometido a pruebas de alta mar desde que saliera del astillero Rosyth en Escocia el pasado mes de junio y posteriormente se uniese a los ejercicios Saxon Warrior. Ahora el portaaviones se encuentra, desde el 16 de agosto, en el puerto de Portsmouth dónde realizará las últimas pruebas antes de ser puesto definitivamente en servicio.
Con la puesta en marcha del HMS Queen Elizabeth, el Reino Unido planea posicionarse como líder mundial en defensa marítima para el resguardo de sus intereses y la de sus aliados, y cuando ambos portaaviones se encuentren activos para el 2020, el Reino Unido tendrá una fuerza operativa y un margen de maniobra nunca antes visto en la historia de la Real Marina.
Ficha técnica
Clase: Clase Queen Elizabeth
Tipo: Portaaviones
Autorizado: 1999
Iniciado: 7 de julio de 2009
Botado: 4 de julio de 2014
Puesta en servicio: 2020
Destino: En pruebas
Características generales
Desplazamiento: 65 000 toneladas
Eslora: 280 m
Manga : Línea de flotación: 39 m- Máxima: 70 m
Propulsión: turbinas de gas y motores diésel
Velocidad: 25 nudos
Tripulación: 1200 tripulantes
Que ejemplo el de la política de defensa británica. Desde la autorización a la entrada en servicio, pasaron 20 años. Sin embargo el proyecto siguió adelante. Habiendo pasado gobiernos de todos los colores y también teniendo en cuenta que los británicos, con el brexit, no están para tirar manteca al techo.
Ojalá algún día nuestra clase política pueda llegar a ése nivel de entendimiento y compromiso. En temas estratégicos. Cómo es la defensa de la soberanía.
De más está decir que al haberse construido localmente, la inversión vuelve en puestos de trabajo, desarrollo y reactivación de la economía.
Aplausos y envidia para con los británicos.
Muchas gracias
Juan Pettigrew