El presidente de Turquía anunció el domingo que el país lanzará un asalto militar contra un enclave kurdo en el norte de Siria “en los próximos días” e instó a Estados Unidos a apoyar sus esfuerzos.
El presidente Recep Tayyip Erdogan dijo que la operación contra el enclave de Afrin apunta a “purgar el terror” de la frontera sur de su país.
La zona de Afrin está controlada por una milicia kurda siria conocida como YPG. Turquía considera que YPG es un grupo terrorista vinculado al proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) que ha librado una sangrienta insurgencia dentro de sus fronteras.
Un portavoz de YPG en Afrin, dijo que los enfrentamientos estallaron después de la medianoche entre su unidad y las tropas turcas cerca de la frontera con Turquía. Fuentes aseguran, que durante el bombardeo, se mató a un combatiente del YPG además de varios civiles heridos.
Turquía y sus aliados occidentales, incluido EEUU, consideran al PKK una organización terrorista. Pero Estados Unidos ha estado armando a algunos de los kurdos de Siria para derrotar al grupo Estado Islámico en Siria, un punto doloroso, en las ya tensas relaciones entre los EEUU y Turquía.
El presidente turco dijo que “a pesar de todo” quiere trabajar con los EEUU y en la región y espera que no se ponga del lado del YPG durante la próxima operación en Afrin.
“Esperamos que (los EEUU) apoyen a Turquía en sus esfuerzos legítimos” para combatir el terrorismo, sentenció Erdogan.