Moscú comenzó la entrega de los sistemas de misiles de defensa antiaérea S-400 Triumf a China en virtud del contrato del año 2014, dijo el jueves a TASS una fuente cercana al sistema ruso de cooperación militar. “La implementación del contrato ha comenzado, el primer envío ha sido despachado a China”, dijo la fuente.
Según dicha fuente, el envío incluye una estación de control, una estación de radar, equipos de energía y soporte, repuestos, varias herramientas y otros elementos del sistema S-400.
La fuente también dijo que el contrato con China no estipulaba transferencia de tecnología ni producción autorizada.
En 2017, Rusia entrenó a un grupo de militares chinos para usar los sistemas S-400. Mientras tanto, el Servicio Federal de Rusia para la Cooperación Militar-Técnica se ha negado a proporcionar ningún comentario.
Contrato con China
En noviembre de 2014, se anunció que Rusia y China habían firmado un contrato de suministro de S-400 y, en noviembre de 2015, el asesor presidencial ruso en cooperación militar, Vladimir Kozhin, confirmó el contrato.
En junio de 2016, el jefe de la Corporación Estatal Rostec de Rusia, Sergei Chemezov, dijo que el Ejército Chino recibiría los sistemas S-400 no antes de 2018. El 7 de diciembre de 2017, Chemezov dijo que la entrega comenzaría en un futuro cercano.
China es el primer comprador extranjero de estos sistemas de defensa aérea, mientras que el segundo es Turquía. En julio de 2017, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan declaró que se habían firmado “ciertos documentos” sobre la compra de los sistemas S-400. El 12 de septiembre de 2017, Rusia confirmó que se había realizado un contrato. Turquía es el primer estado miembro de la OTAN en comprar los sistemas S-400 Triumf.
Sistema S-400
El S-400 Triumf (nombre de la OTAN: SA-21 Growler) es el sistema de misiles antiaéreos de largo alcance más avanzado que entró en servicio en 2007. Está diseñado para destruir aeronaves, y misiles balísticos cruceros, incluidos los de mediano alcance, y también puede usarse contra objetivos terrestres. El complejo sistema S-400 puede atacar objetivos a una distancia de 400 km y a una altitud de hasta 30 km.
En la actualidad, solo las Fuerzas Armadas de Rusia están equipadas con los sistemas S-400. Hay planes para suministrarlos a cuatro países: China, Turquía, India y Arabia Saudita.
