El Ministerio de Defensa, que conduce Oscar Aguad, entregó en comodato, a través del Ejército Argentino, una planta potabilizadora por filtración por ósmosis inversa a la cartera de Defensa de la República de Ecuador, en el marco de un acuerdo de cooperación.
Ambos países mantienen un acuerdo de cooperación con el propósito de desarrollar programas y planes de asistencia, de cooperación técnica y educativa.
El Ministerio de Defensa de Ecuador expresó su intención de incrementar la capacidad de sus Fuerzas Armadas en materia de potabilización de agua, motivo por el cual la cartera argentina manifestó su disposición para colaborar con ese objetivo a partir de las capacidades disponibles.
La planta potabilizadora se destinará a realizar pruebas y ensayos, asistir a la sociedad civil y contribuir al desarrollo industrial y tecnológico de Ecuador.
El acuerdo estará vigente por dos años y podrá ser renovado automáticamente por unos años más para su utilización.
Sin cuestionar las razones de política exterior, me gustaría hacer una breve reflexión.
En la Argentina, hay cientos de lugares en la cual una planta de potabilización de agua podría llevar calidad de vida a mucha gente que no la tiene.
Señores,reflexionemos, la solidaridad comienza por casa donde las necesidades son innumerables, más el agua potable.
Muchas gracias
Responde a cuestiones estratégicas de cooperación internacional con nuestros vecinos mas próximos. Si bien es verdad lo que decís no podemos desatender las relaciones bilaterales. Argentina tiene la capacidad de ocuparse de sus necesidades internas y a su vez afianzar los lazos de confianza con otros pares regionales. No caigamos por favor en el simplismo de pensar que porque nosotros lo necesitamos debemos ignorar otras cuestiones que pueden traernos enormes beneficios en el futuro. No es el caso pero si a Ecuador le resultan útiles estos equipos tal vez podrían comprar 10 o 20 mas a la república y en ese caso seria mucho mas beneficioso.
Mario ROCA Gran reflexion!!! Siempre nuestros gobernantes pensando en los extranjeros en vez de en las personas a las que tienen que gobernar y gracias a las cuales son puestos en los cargos que ocupan.