La embajada rusa en Londres, ha publicado una declaración en la que afirma que el jefe del laboratorio del Ministerio de Defensa británico en Porton Down, “confirma el desarrollo de sustancias venenosas”, incluida la que se utilizó para envenenar a Sergei Skripal. La información fue brindada por la agencia de noticias rusa Interfax.
Según un portavoz de la embajada rusa, las declaraciones de Gary Aitkenhead, el director ejecutivo del Laboratorio de Ciencia y Tecnología de Defensa en Porton Down, habló sobre los altos niveles de medidas de control de seguridad del laboratorio que no permiten filtraciones, y confirmó de facto, que está desarrollando y estudiando nuevos componentes para agentes químicos de guerra.
“De hecho, hemos notado esa declaración del director ejecutivo del laboratorio. Esto equivale a admitir que la instalación secreta es un lugar donde se están investigando y desarrollando nuevos componentes de venenos de grado militar. En particular, el Sr. Aitkenhead, quién no negó la existencia de armas químicas. Aparentemente, incluyen al agente A-234 que, de acuerdo con declaraciones oficiales británicas, fue utilizado para envenenar a Skripals y al sargento Bailey”, dijo la embajada.
Según la Embajada, el Secretario de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, también insinuó que tales declaraciones están disponibles en una entrevista el 19 de marzo.
“Estas declaraciones no nos dejan más remedio que reiterar nuestra demanda de información completa sobre la investigación de envenenamiento de Salisbury, y que la misma se proporcione públicamente, como también se informe sobre el programa en desarrollo de venenos con uso militar en el establecimiento de Porton Down, y que la misma se divulgue por completo”, demandó la embajada.
Gran Bretaña había acusado previamente a Rusia de desarrollar secretamente gas Novichok.
El Ministerio de Asuntos Exteriores británico dijo anteriormente que el presidente ruso, Vladimir Putin, pudo haber dado la orden de usar armas químicas contra el ex agente de inteligencia Sergei Skripal en Salisbury.