Francia desplegará un destacamento de aviones caza en la región del Indo-Pacífico para un importante ejercicio aéreo en Australia y para interacciones adicionales con las fuerzas aéreas asiáticas, ya que Francia busca aumentar su presencia en la región.
De acuerdo con un anuncio de la Fuerza Aérea Francesa, tres aviones Dassault Rafale partirán de Francia hacia Darwin en el norte de Australia a fines de julio mediante escalas en Al-Dhafra en los Emiratos Árabes Unidos y Singapur.
A los Rafales se unirá un Boeing C-135FR Stratotanker de la Fuerza Aérea francesa, un avión de transporte aéreo estratégico Airbus A400M y un avión de transporte de pasajeros Airbus A310 para el despliegue. Desde los Emiratos Árabes Unidos, un único avión cisterna multiusos Airbus KC-30A de la Fuerza Aérea Real de Australia acompañará al avión francés para el viaje a Australia.
En Australia, los franceses participarán en el Ejercicio Pitch Black, un ejercicio bianual de combate aéreo multinacional a gran escala en el que participan aproximadamente 80 aviones y personal de 16 países que tendrá lugar durante tres semanas en agosto.
Tras Pitch Black, el contingente francés visitará Indonesia, Malasia, Singapur y luego India antes de que los Rafale regresen a Al-Dhafra entre el 19 de agosto y el 4 de septiembre. El despliegue francés, cuyo nombre en clave es PEGASE 2018, involucrará a 90 aviadores franceses y comandos junto con 40 toneladas de equipos técnicos y de apoyo.
El despliegue de PEGASE 2018 es el mayor despliegue de la Fuerza Aérea francesa en la región desde que se desplegaron seis Dassault Mirage 2000 en la región en 2004, donde también participaron en una versión anterior de Exercise Pitch Black.
Según la Fuerza Aérea Francesa, los objetivos de este despliegue son perfeccionar la capacidad de la Fuerza Aérea Francesa para desplegar su poder aéreo a nivel mundial, fortalecer la presencia de Francia en la región estratégica del Indo-Pacífico y profundizar las relaciones con los principales países regionales.
El despliegue también servirá como una oportunidad para exhibir la industria aeroespacial y de defensa francesa, con Indonesia y Malasia siendo vistas como oportunidades de exportación para el Rafale y la India en busca de más cazas, ya que han comprado 36 de los aviones franceses.
Singapur también es un posible candidato para las ventas de A400M, con la flota más antigua de Lockheed Martin C-130 Hércules que se aproxima a los 60 años de edad.
El despliegue es otra señal de una creciente presencia militar francesa en la región. La ministra de las fuerzas armadas francesas, Florence Parly, al hablar en la reciente cumbre de Shangri-La Dialogue en Singapur, señaló que en 2017 no menos de cinco buques de guerra franceses navegaron por el Indo-Pacífico, que también es donde 3.5 millones de millas cuadradas de la zona económica exclusiva francesa, junto con los territorios de Nueva Caledonia y la Polinesia Francesa, se encuentran.
Durante su discurso, Parly también indicó que Francia continuará intensificando su participación en la región en áreas como la no proliferación nuclear, la lucha contra el terrorismo y la defensa del derecho internacional, además de continuar los esfuerzos para profundizar los lazos de su país con las naciones regionales.
