Taiwán ha declarado que sus helicópteros de ataque Boeing AH-64E Guardian Apache están en pleno funcionamiento, según informó su Ministerio de Defensa Nacional.
En una ceremonia celebrada el 17 de julio en la base del ejército tawiano en Longtan, al norte de Taiwán, la 601ª Brigada de Aviación fue declarada en pleno funcionamiento cuando se puso en servicio su segundo escuadrón de Guardia Apache.
La puesta en servicio de la flota taiwanesa de 29 Guardianes Apaches representa un gran salto en la capacidad de la isla, que hasta ahora ha estado operando con los sobrevivientes restantes de 63 helicópteros de ataque Bell AH-1W Super Cobra entregados en la década de 1990.
A la ceremonia asistió el presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, quien dijo en su discurso que la brigada tiene un papel vital en los esfuerzos del ejército taiwanés para defender a Taiwán y disuadir al enemigo.
La 601ª Brigada de Aviación se compone de dos escuadrones que operan los 29 Guardianes Apaches de Taiwán, y el primer escuadrón alcanzó su capacidad operativa completa en julio de 2017.
En 2011, se reveló que Taiwán había firmado un contrato, reportado por un valor de hasta $ 1.91 mil millones, para 30 Guardianes Apaches luego de la notificación al Congreso por parte de la Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa de Estados Unidos de la venta en octubre de 2008. Las entregas comenzaron en 2012 y la capacitación de la tripulación por parte de los Estados Unidos comenzó más tarde ese mismo año.
Los primeros seis helicópteros fueron transportados por mar a Taiwán en noviembre de 2013, y los Guardianes Apache restantes fueron entregados en tandas. Los últimos helicópteros fueron recibidos en octubre de 2014, aunque en ese momento uno había sido cancelado cuando chocó contra un edificio residencial en el condado de Taoyuan, al norte de Taiwán, en abril de ese año.
Los Guardianes Apaches taiwaneses están equipados con el radar de ondas milimétricas Longbow AN / APG-78, que es capaz de operaciones diurnas, nocturnas y para todo tipo de clima y puede disparar misiles Hellheed Martin AGM-114L / M Hellfire que han sido adquiridos por Taiwán.
Taiwán ha estado bajo la presión diplomática cada vez más severa de la vecina China, que ve a la isla autónoma como una provincia deshonesta y no ha descartado el uso de la fuerza para volver a tomarla. También ha utilizado su influencia diplomática y económica para restringir las ventas de armas extranjeras a Taiwán, aunque los Estados Unidos están obligados, por la Taiwan Relations Act, a “poner a disposición de Taiwán artículos de defensa y servicios de defensa en la cantidad necesaria para permitir a Taiwán mantener una capacidad suficiente de autodefensa”.
