Paris – La oficina de adquisiciones francesa y la Armada presentarán propuestas al Ministerio de las Fuerzas Armadas sobre la base de estudios de definición para un futuro portaaviones, según el jefe de la unidad de operaciones de armamentos navales de la Dirección General de Armamento.
La DGA y la Armada han estado trabajando en una “reflexión para estudios de definición”, con los estudios requeridos para lanzar el proyecto de portaaviones, según dijo Laurent Sellier a Defense News el 24 de septiembre. La industria ha servido como observador, mientras que la oficina de adquisiciones y el servicio han encabezado las discusiones
Los estudios considerarán la capacidad del futuro portaaviones para transportar el avión de combate Rafale y su sucesor, así como los aviones no tripulados, dijo. Le corresponderá al ministerio “dar luz verde” a los contratos del portaaviones.
Sellier estaba hablando en el marco de una conferencia de prensa celebrada por Gican, la asociación de la industria que respalda la feria comercial Euronaval, que se inaugura el 23 de octubre.
Dassault Aviation, el constructor naval Naval Group y el especialista en electrónica Thales han estado sentados en las discusiones lideradas por DGA y la Marina, según dijo un ejecutivo de la industria a Defense News. “Existe un trabajo de equipo cercano para abordar el problema general”, dijo el ejecutivo.
La DGA y la Marina lanzaron el primer estudio a fines de agosto, examinando las lecciones aprendidas de los portaaviones en operación y revisando los requisitos operacionales del futuro transportista, dijo el ejecutivo.
Thales podría contribuir con su experiencia de trabajar en el portaaviones británico Queen Elizabeth. Se podría invitar a otras compañías, como MBDA, a participar en los estudios.
Un segundo estudio, en gran medida dirigido por la DGA, se centrará en la tecnología y la arquitectura general, incluidos los sistemas de combate a bordo, el sistema de sistemas y la arquitectura naval, dijo el ejecutivo. Se espera que el estudio se inicie a fines de octubre o principios de noviembre.
Se espera completar el dossier general que comprende los dos estudios a fines de 2019 o principios de 2020, y permitirá a las autoridades decidir sobre las capacidades del buque. Los estudios considerarán factores clave como el tamaño del buque, la propulsión, tanto convencional como nuclear, y las capacidades de lanzamiento de las aeronaves.
La aeronave no se incluirá en el presupuesto del portaaviones, pero será un elemento importante en el diseño y construcción del buque, que será un sistema de sistemas. Los estudios ayudarán a determinar el presupuesto para el transportista.
Ha habido tres grandes portaaviones construidos en Occidente, el USS Gerald R. Ford en Estados Unidos, y el HMS Queen Elizabeth, de la marina británica, desde que Francia lanzó el Charles de Gaulle, dijo Robbin Laird, analista de la consultora ICSA, con sede en Washington. y Paris
Cualquier estudio francés debería considerar esos barcos y ver la tecnología disponible para un nuevo buque, como un sistema de lanzamiento de aeronaves electromagnéticas, dijo. Los franceses deberían considerar el impacto de un “sistema de fuerza en evolución”, como el uso de armas de energía directa para defensa cercana y la integración de sistemas aéreos y marítimos, agregó.
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Super Hornets y Rafales sobrevolando el USS Nimitz, en ejercicios conjuntos pasados.
Otro factor importante en el diseño de un nuevo portaaviones podría incluir la adaptación de Francia del avión de combate franco-alemán planeado a una versión naval basada en un portaaviones, dijo. Ese futuro caza reemplazará al Rafale y al Eurofighter Typhoon.
Gran Bretaña volará el F-35 Joint Strike Fighter en sus portaaviones, dijo. Ese despliegue del F-35 tanto del Reino Unido como de la Armada Italiana exige la interoperabilidad del futuro buque francés y sus aviones con los operadores del avión.
Los pilotos de la Marina francesa han volado el Rafale en los portaaviones estadounidenses como parte de un entrenamiento, dijo el Contraalmirante de la Armada francesa, Gilles Boidevezi, a los asistentes a la conferencia de prensa.
La Armada francesa envió pilotos, personal de apoyo, 12 aviones Rafale y un avión Hawkeye a Estados Unidos a principios de este año para calificar y entrenar con la Armada de los EE. UU. Los pilotos franceses volaron desde el USS George Bush, saliendo de la base naval de Newport.
El Charles de Gaulle comenzó recientemente las pruebas de mar desde la base naval de Toulon después de unos 18 meses de una importante revisión en dique seco.
La actualización incluyó la sustitución del combustible nuclear a bordo y la modernización de los sistemas de combate y telecomunicaciones. El transportador ahora solo volará el Rafale, habiéndose retirado del servicio al caza Super Etendard.
