Los Estados Unidos y sus aliados de la OTAN se están uniendo para cooperar más estrechamente en el desarrollo y despliegue de sistemas marítimos no tripulados, de acuerdo con un acuerdo firmado por los jefes de defensa de 13 aliados de la OTAN.
Durante la cumbre de julio, las potencias firmaron un plan para buscar conjuntamente tecnologías orientadas a la caza, según un comunicado de prensa de octubre que hizo público el acuerdo.
“El uso de sistemas no tripulados es un paso adelante potencialmente cambiante en la tecnología marítima”, se lee en el comunicado. “Trabajando junto con los recursos navales tradicionales, estos sistemas no tripulados aumentarán tanto nuestra conciencia situacional como nuestro control de los mares”.
El lanzamiento, aunque carece de detalles, parece abrir la posibilidad de que el desarrollo de drones submarinos y de superficie podría ser aún más lucrativo para las compañías involucradas, ya que sugiere que la alianza busca sistemas comunes e interoperables.
“A través de esta iniciativa, los Aliados también podrán explotar economías de escala para reducir los costos, lo que permitirá que los crecientes presupuestos de defensa vayan aún más lejos”, señala el comunicado.
Los países involucrados en el acuerdo son Bélgica, Dinamarca, Alemania, Grecia, Italia, los Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, España, Turquía, el Reino Unido y los Estados Unidos.
Para los observadores de la OTAN, el acuerdo es la última señal de cuán seriamente la alianza está tomando la amenaza de los submarinos rusos.
“Los miembros de la OTAN están alarmados por la creciente amenaza de los submarinos rusos, y están invirtiendo más recursos para lidiar con eso”, dijo Jorge Benítez, miembro principal del Consejo del Atlántico que anteriormente se desempeñó como líder en asuntos de la OTAN para la Oficina del Secretario de Defensa. “Bajo el mandato del [presidente Vladimir] Putin, Rusia ha desplegado submarinos nuevos y sigilosos en el Atlántico norte, que son mucho más difíciles de rastrear para la OTAN.
“Esta nueva cooperación multinacional en drones submarinos es el ejemplo más reciente de que la OTAN está tomando la amenaza rusa en el Atlántico norte mucho más en serio que en el último cuarto de siglo“.