Los métodos más nuevos de interoperabilidad de la aviación naval se probaron en los simulacros del “Escudo del Océano” en el Mar Mediterráneo, que también involucró a bombarderos estratégicos Tu-160, y los sistemas de alerta temprana y guía de radar aerotransportados A-50, según declaró este viernes el Ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu.
“Permítanos resumir los resultados de los simulacros “Ocean Shield” que se llevaron a cabo a principios de septiembre en el mar Mediterráneo. Es la primera vez, en la historia moderna de Rusia, que se realizan ejercicios a tanta distancia del país”, subrayó Shoigu.
Los simulacros practicaron medidas para un agrupamiento multi-servicio de fuerzas y tropas para prepararse y realizar operaciones de combate, dijo el ministro de Defensa.
“Durante los simulacros, se probaron las nuevas técnicas tácticas y los métodos de operación de las fuerzas navales y de la aviación”, dijo Shoigu.
Los buques de guerra de las flotas de Rusia hicieron un viaje a una distancia de más de 4.500 km, mientras que los barcos de la Flotilla del Caspio pasaron por el Canal Volga-Don y el Estrecho del Mar Negro desde el Mar Caspio, dijo.
“Los aviones de la aviación naval volaron desde los aeródromos del norte, el Báltico y Crimea hasta la base aérea de Hmeymim, cubriendo una distancia de más de 5.000 km. Bombarderos estratégicos con misiles Tu-160, sistemas de alerta temprana con guía de radar A-50 y repostaje aéreo Il-78 de la Fuerza Aeroespacial de Rusia participaron en los simulacros también”, dijo el jefe de la defensa.