El retraso es un gran golpe para Boeing, que había prometido entregar el primer avión a finales de 2018 después de una serie de retrasos en las fechas de entrega que se remontan a agosto de 2017.
Kelly Kaplan, portavoz de Boeing ha dicho “”El KC-46 sigue siendo una prioridad absoluta y esperamos poder entregar los aviones cisterna en asociación con nuestra Fuerza Aérea”.
La Fuerza Aérea tenía la intención de aceptar el primer KC-46 a finales de diciembre y estaba esperando la firma de Mattis, que finalizaría los planes de entrega, pero Mattis anunció que renunciaría al puesto más alto del Departamento de Defensa en febrero, y sólo tres días después, el presidente Donald Trump a traves de su twitter anunció que Mattis terminaría su trabajo como secretario de Defensa a finales de 2018.
La situación se complicó aún más porque el subsecretario de Defensa Patrick Shanahan -que a finales del 31 de diciembre asumirá temporalmente el papel de secretario de Defensa de Mattis- es un ex ejecutivo de Boeing y debe recusarse de todas las decisiones que involucren a la compañía.
Los funcionarios de Boeing esperan que la Fuerza Aérea pueda seguir adelante con la entrega después de una serie de reuniones a principios de 2019 y Dennis Muilenburg, CEO de Boeing, comentó “Estamos trabajando con nuestro cliente de la Fuerza Aérea de EE.UU. para completar todos los pasos necesarios para entregar el primer avión cisterna este trimestre.”
Por el momento no está claro quién autorizará la entrega del KC-46 con Shanahan excluido del proceso, aunque podría recaer en la Secretaria de la Fuerza Aérea Heather Wilson o en Ellen Lord, subsecretaria de Defensa para su adquisición y mantenimiento.
La Fuerza Aérea planea comprar 179 KC-46. La base McConnell de la Fuerza Aérea de Kansas se convertirá en la primera instalación en recibir los nuevos aviones cisterna.
