El personal de la Marina de los Estados Unidos realizó un ejercicio de aprovisionamiento de dos barcos, para uso futuro en los escuadrones anfibios y tropas terrestres.
El ejercicio se realizó el mes pasado, cuando la Marina desplegó un destructor y un buque de transporte anfibio para probar un nuevo concepto que podría servir para operaciones futuras.
“Llevamos a cabo nuestra misión de manera segura y exitosa”, dijo el capitán Ken Coleman, especialista en LCG-1, en un comunicado de prensa. “Doy todo el crédito a nuestros tremendos marineros e infantes de marina. Demostraron una excelente preparación, experiencia táctica y representaron a nuestra nación y a la Marina con gran orgullo y profesionalismo”.
El transporte USS Somerset, el destructor USS Wayne E. Meyer y la Special Purpose Marine Air-Ground Task Force-Peru se desplegaron juntos como Grupo 1 de Combate Litoral en noviembre y diciembre. El ejercicio frente a los sudamericanos coincidió con la participación de los barcos en las ceremonias del bicentenario, en Valparaíso, Chile, de la Armada de Chile.
Mientras estaban en el mar, realizaron tareas como desplegar tropas en tierra, coordinar acciones de seeguridad con la Guardia Costera y hospedar a un equipo quirúrgico para el trabajo de asistencia humanitaria.
Personal de la Armada y de la Infantería de Marina del grupo de combate también trabajó con la infantería naval peruana en un ejercicio de asistencia humanitaria y asistencia en casos de desastre y realizó un ejercicio de patrulla marítima con los activos de la marina ecuatoriana para combatir la pesca ilegal.
El USS Somerset regresó a su puerto base de la Base Naval de San Diego, mientras que el USS Wayne E. Meyer regresó a la Base Conjunta de Pearl Harbor Hickam.
