Boeing recibió un contrato por 127.6 millones de dólares para el programa de extensión de la vida útil de la bomba nuclear B61-12 de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
La Administración Nacional de Seguridad Nuclear, que forma parte del Departamento de Energía, mantiene y mejora el arsenal de armas nucleares de EEUU sin realizar pruebas de explosivos nucleares.
“El Programa de Extensión de Vida B61-12 es esencial para que la NNSA pueda cumplir su misión de certificar la efectividad del elemento de disuasión nuclear de la nación”, según afirmó la agencia.
Con casi 50 años de servicio, la bomba de gravedad nuclear B61, desplegada desde las bases de la Fuerza Aérea de los EEUU, es el arma más antigua y versátil de la reserva de los EEUU. Se han realizado numerosas modificaciones para mejorar la seguridad y la confiabilidad del B61, y cuatro variantes del B61 permanecen en la reserva: el 3, 4, 7 y 11.
La NSSA quiere extender la vida útil de la bomba de gravedad nuclear B61 en al menos 20 años, así como aumentar la seguridad y su rendimiento.
La primera producción de la unidad de 12 variantes se producirá en el año fiscal 2020. La bomba tendrá aproximadamente 12 pies de largo y pesará aproximadamente 825 libras.