Poco se habla de las presiones que sufre Ucrania desde 2014 bajo los deseos imperialistas de una Rusia poco estratégica y dispuesta a la negociación.
En el intento de expansión de la Federación, son ahora Crimea y Donbás los territorios dominados por el ejército ruso. Hasta hoy, Rusia continúa ocupando ilegalmente la República Autónoma de Crimea de Ucrania (26 081 km²) , la ciudad de Sebastopol (864 km²) , ciertas áreas de las regiones de Donetsk y Luhansk ( 16799 km²) , en un total de 43744 km² o el 7,2% del territorio de Ucrania.
Con fuerte presencia militar rusa, se estiman 5 muertes al día de soldados ucranianos que intentan defender su territorio de la supremacía de Rusia. Las áreas ocupadas se han convertido en un territorio de miedo, las autoridades de ocupación actúan mediante medidas represivas, recurriendo a violaciones sistemáticas y en gran escala de los derechos humanos y las libertades fundamentales. La alarmante situación de los derechos humanos en Crimea ocupada fue condenada por la Resolución 71/205 de la Asamblea General de las Naciones Unidas «Situación de los derechos humanos en la República Autónoma de Crimea y en la ciudad de Sebastopol (Ucrania)», adoptada el 19 de diciembre de 2016.
Con gran desarrollo armamentístico y de avanzada, Ucrania no pretende desatar ninguna guerra, que no es un conflicto latente sino una cuestión de la historia entre estos dos países, irresuelta. Con el expreso apoyo al pueblo ucraniano de Estados Unidos y Canadá, este último con la comunidad ucraniana más grande del mundo, se convierten en sus primeros aliados en esta tensión sin miras de resolverse. Seguido, se encuentra Gran Bretaña quien insta constantemente al gobierno ruso a aliviar tensiones mediante condiciones propuestas en tratados de los diferentes foros internacionales del que es parte Rusia aunque sin cumplir ninguno de los requerimientos, recientemente la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa aprobó un texto que hace posible el regreso de Rusia a este organismo. Quien había quedado suspendida del organismo como sanción por la anexión de Crimea.
Los Acuerdos de Minsk (Protocolo de 5 de septiembre de 2014, Memorando de 19 de septiembre de 2014 y Paquete de medidas de 12 de febrero de 2015) son la base para la resolución política del conflicto en Donbás. Han sido violados por la Federación de Rusia con regularidad. La firma de los primeros documentos en septiembre de 2014 siguió a la incursión directa de las tropas regulares rusas en Donbás y las intensas hostilidades cerca de la ciudad de Ilovaysk , el lugar de uno de los crímenes más vergonzosos cometido por el ejército ruso en Donbás. Al menos 366 soldados ucranianos murieron y 429 resultaron heridos allí mientras abandonaban la ciudad en el llamado “corredor verde” bajo las garantías de los comandantes de las tropas rusas.
Para concluir este vuelo rapaz por la situación que arrastran Ucrania y Rusia hace décadas, podemos decir que las sanciones políticas y económicas son la herramienta más efectiva de presión sobre el estado agresor. Redujeron significativamente la posibilidad de una invasión a gran escala y obligaron a Rusia a sentarse en la mesa de negociaciones, en particular dentro del Grupo de Contacto Trilateral (Ucrania y Rusia son partes en el conflicto, la OSCE es un mediador) y el Cuarteto de Normandía (Ucrania y Rusia). Rusia es parte en el conflicto, Francia y Alemania son mediadores). La decisión de aliviar o levantar las sanciones fomentará una nueva ola de agresión militar rusa.
lamentable el articulo, CNN sos vos??
Por fin veo algo de conflicto bélico en mi país. Las personas mueren, muchos heridos, mutilados, pierden sus casas por el capricho de un loco y en la prensa nada!