El USS Gerald R. Ford, el nuevo portaaviones de la Marina de las Estados Unidos, aún no está preparado para operar el nuevo caza furtivo F-35. Sin embargo, ya dio luz verde al resto de las aeronaves que planea operar a bordo, incluidos el C-2A Greyhound, E-2C Hawkeye y E-2D Advanced Hawkeye, F / A-18E / F Super Hornet y E / A-18G Growler.
El Advanced Arresting Gear o equipo de detención avanzada, es crítica para la recuperación de la aeronave en su regreso al portaaviones. El Advanced Arresting Gear, una de las más de 20 nuevas tecnologías incorporadas al portaaviones de la Clase Ford, es un sistema de cables tensados donde los aviones se enganchan con ganchos de cola, un sistema necesario dada la brevedad de la pista. El AAG está diseñado para recuperar una serie de aviones diferentes, así como para reducir el estrés en las aeronaves, con una disminución de la mano de obra a la vez que se mantienen los más altos estándares de seguridad.
Sin embargo, en la lista no figura el F-35C, la variable del programa F-35 Lightning II basado en portaaviones. “Los portaaviones Clase Nimitz y Clase Ford, por diseño, pueden operar con el F-35C”, dijo previamente el capitán Daniel Hernández, portavoz del jefe de adquisiciones de la Marina.
Agregó que “hay que realizar modificaciones a ambas clases de portaaviones para poder emplear plenamente las capacidades de los F-35 y permitirles ser más efectivos en un despliegue completo”.
Se espera que esas modificaciones se completen después de que el portaaviones sea incorporado a la flota, lo que significa que cuando la Armada reciba su portaaviones, se encuentra muy por encima de su presupuesto, está retrasado en su entrega y aún persisten problemas en su desarrollo, no podrá operar el F-35C.
En EEUU crece la preocupación por la incapacidad de los nuevo portaaviones para lanzar y recuperar a los nuevos cazas furtivos de quinta generación. Asimismo, el Congreso expresó nuevamente su indignación frente a la Marina de los EEUU, por continuar con su práctica de aceptar entregas de productos inacabados para eludir las restricciones presupuestarias.
Por otro lado, los elevadores de armas avanzadas, son otro gran obstaculo que enfrenta la Marina, puesto que es un sistema esencial para el movimiento rápido de bombas y misiles a la cubierta de vuelo.
Imagen de portada: Erik Hildebrandt / Marina de los Estados Unidos