Soldados estadounidenses de la 3ª Brigada Blindada de Combate “Lobo Gris” han tenido la oportunidad de probar los tanques de combate T-80U de fabricación rusa durante su visita al acuartel de la Brigada Blindada de Corea del Sur, la única unidad en las fuerzas armadas de Corea del Sur que tiene vehículos blindados fabricados en Rusia.
Actualmente, y pese a que la mayoría del armamento del ejército de Corea del Sur procede de Estados Unidos y de sus propios desarrollos, Seúl opera los tanques de batalla principales T-80U de fabricación rusa y los vehículos de combate de infantería BMP-3, que fueron entregados al ejército surcoreano en la década de 1990 como parte del pago de la deuda que tenía contraída la antigua Unión Soviética con el gobierno de Seúl.
Cuando se disolvió la Unión Soviética, Moscú ofreció a Corea del Sur pagar la deuda con lo único que tenía en abundancia: armamento de última generación. Al principio, Seúl se resistió, pero en 1994 acordó que la mitad de la deuda se saldaría mediante una transferencia de armas rusas.
Hasta la fecha, los vehículos de combate rusos están en servicio en dos batallones de la 3ª Brigada de tanques. Las entregas de BMP-3 desde Rusia comenzaron en 1996. Según la base de datos de transferencias de armas del Instituto Internacional de Investigación de la Paz de Estocolmo (SIPRI), Rusia entregó a la República de Corea 43 MBT T-80U y 67 IFV BMP-3 entre 1995 y 2006.
Según el portal checkpointasia.net, el T-80U ha sido el tanque más potente de Corea del Sur durante casi 20 años, hasta el 2014, cuando su blindado K2 Black Panther de producción nacional que cuenta con un cañón Rheinmetall L55 de 120 mm, entró en servicio,