Lockheed Martin recibió un contrato por USD 266.2 millones para brindar herramientas especiales y equipos de prueba que respaldan el programa F-35, dijo el Pentágono.
El contrato, anunciado el viernes por el Departamento de Defensa, cubre el trabajo para el avión F-35 Lightning II de la Fuerza Aérea de los EEUU, la Marina, el Cuerpo de Marines y los no-participantes del Departamento de Defensa.
La mayoría del trabajo se realizará en las instalaciones de Lockheed en Fort Worth, así como en otras 16 ubicaciones en EEUU, además de en siete instalaciones extranjeras. Se espera que el trabajo se complete para julio de 2022.
El caza furtivo, del cual hay tres variantes, está en uso, por pedido o en adquisición planificada por 15 países y su precio varía entre USD 82 millones y los USD 115 millones cada uno.
El F-35 de quinta generación, considerado como el avión más moderno del mercado y desarrollado con lo último en tecnología, ha sido muy criticado por tener una tasa de preparación muy baja según los informes, es decir que muchos de los F-35 aún se encuentran incompletos en su producción.
El Centro de Información sobre Defensa del Proyecto de Supervisión del Gobierno informó en agosto que solo el 8.7 por ciento de los 23 aviones F-35 dentro de la flota de pruebas operativas de Edwards AFB, California, se encuentran “totalmente capaces de llevar a cabo una misión”.
El retraso en la preparación del avión se atribuyó a la escasez de piezas y a una cadena de suministro inadecuada. Ante esta situación en los último meses se han adjudicado varios contratos a medida que el Congreso continúa con la búsqueda de proveedores.
El costo del programa F-35 Lightning II Joint Strike Fighter está aumentando nuevamente, según un informe dado a conocer en agosto del Departamento de Defensa, aunque los nuevos aumentos se atribuyeron parcialmente al software y otras actualizaciones de la flota global existente.
El informe, que fue una actualización de su presupuesto para 2020, señaló que el costo del programa F-35 aumentó en USD 25 mil millones desde 2018, representando el 4 por ciento de incremento en el presupuesto total del gasto de defensa de los EEUU para el próximo año.
Imagen de portada: LCpl. Dylan Hess/Marina de los EEUU