5 de abril de 1982. Mantener las acciones diplomáticas fue un objetivo central a llevar a cabo durante aquel lunes. Pero el Reino Unido, aún sin considerar como un hecho el accionar argentino sobre las Islas y las tropas ya presentes en el territorio, decide iniciar con el envío de efectivos, aviones, buques y armamento. 

Puerto Argentino: nuevo gobernador militar y civil de las Islas Malvinas

Argentina designó al General Mario Benjamín Menéndez como gobernador militar y civil de las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, asumiendo así su puesto de Gobernador de las Islas en Stanley (capital de las Islas, posteriormente decretada con el nombre de Puerto Argentino). Menéndez ejercía también como Comandante del Teatro Malvinas, compuesto por tres componentes: el Comando Naval (CNTO) de ARA, el Comando Terrestre (CTTO) del EA y el Comando Aéreo (CATO) de la FAA. A la ceremonia de posesión del cargo acuden diversas personalidades, tanto civiles como militares. 

Murió el general Menéndez, el jefe de las tropas en Malvinas durante la  guerra
General Mario Benjamín Menéndez

Algunas de las figuras más importantes del país en su momento allí presentes fueron el ex presidente, Teniente General Jorge Rafael Videla, el Comandante del Teatro de Operaciones y del Quinto Cuerpo de Ejército, el General de División Osvaldo García, el Ministro de Interior, General de División Alfredo Saint Jean, entre otros. Se destacan también representantes de partidos políticos, empresarios, sindicalistas y periodistas. 

En el gabinete del reciente gobernador resonaban los nombres de Carlos Boomer-Reeve (nombrado Secretario de Gobierno), el Comodoro Guillermo Mendiberri (designado en Inteligencia), el coronel de Intendencia Oscar Chinini (como Secretario de Hacienda), el coronel Ingeniero Manuel Dorrego (en Obras Públicas), entre otros. 

En conjunto, el accionar argentino causó cierto rechazo al otro lado del Atlántico: mientras que Argentina anunciaba formalmente la suspensión de todos sus pagos al Reino Unido, las tierras de Thatcher enfrentaron diversas renuncias en el gabinete. El motivo principal de las mismas radicó en que el Reino Unido, por tradición, espera la dimisión de aquellos ministros que hayan llevado a cabo políticas fracasadas o que hayan mostrado ignominia. El entonces canciller Lord Carrington, quien asumió como Ministro de Relaciones Exteriores en 1979, fue uno de los nominados a abandonar su cargo junto a otros dos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y el ministro de Defensa, John Nott. Carrington fue rápidamente reemplazado por Francis Pym. 

Argentina y el despliegue aéreo en las islas

En consonancia con el nombramiento del General Menéndez como Gobernador de las Islas, Argentina anuncia la creación del Comando de la Fuerza Aérea Sur (FAS). La FAS estuvo comandada por el brigadier Ernesto Horacio Crespo y, además de ser considerada como una gran unidad de batalla aérea, fue la responsable de afectar más de un tercio de la flota británica a lo largo del conflicto, iniciando sus operaciones el 1 de mayo de 1982. 

Bautismo de fuego 
Brigadier Ernesto Horacio Crespo. Fuente: Los Andes

El 5 de abril también se organizó la Sección Operativa de Búsqueda y Salvamento (SOBYS) a cargo del mayor Norberto Héctor Barozza, que luego fue asignada con un organigrama específico y tareas claras para la búsqueda, asistencia y salvamento del personal y material en peligro el próximo 8 de abril. Sus principales operaciones comenzaron el 30 de abril, donde el puesto de comando emitió treinta y seis órdenes fragmentarias.

Aquel lunes por la mañana, las Islas también recibirían al Hércules C-130 con generador y central de fuego de artillería AA, mientras que por la tarde serían testigo de la llegada del segundo Hércules, el cual no solo contaba con ocho hombres, sino también con dos cañones Oerlikon de 35 mm con director de tiro Superfledermaus, junto a cuarenta cajones de municiones y equipo específico para el combate, como carpas, lona tapa carga, entre otras. Este mismo lunes, se emplazó en la BAM Malvinas un radar de vigilancia Elta.

Arribar a Malvinas implicó la descarga del material sobre la plataforma, próxima a la torre de vuelo. El análisis de un probable ataque fue fundamental para el acomodamiento del recién llegado material, así como también lo fue fijar un punto de referencia: el faro náutico Penbroke. En caso de ataque, el sector elegido sería defendido con la 3ª batería (con mayor potencia de fuego), complementando a la batería de 20mm Rheinmetal (RH) que se encontraba al mando del 1er teniente Alberto Dalves.

Como punto de control, la batería RH concerniente al Puesto Comando operaba el radar ELTA de vigilancia local, ubicándose en un viejo bunker. La munición asignada fue de 15.000 disparos para las armas de 35mm, y una cantidad similar para las de 20mm.

Luego de un arduo día de despliegue de armamento, munición y efectivos, esa misma noche ocurrió el primer “hostigamiento ambiental”, donde el clima no ayudó al personal encargado de controlar el puesto. La carpa de la Armada se desplomó, y el personal permaneció allí como refugio durante la fría noche del 5 de abril.

El Reino Unido moviliza a la Royal Navy

El Reino Unido, vislumbrando el avance argentino sobre las islas, decidió enviar desde Portsmouth a los portaaviones HMS Hermes y HMS Invencible junto al RFA Olmeda, mientras que las fragatas tipo 21 HMS Alacrity y HMS Antelope zarparon rumbo al Atlántico Sur desde Plymouth. Su partida, avivada por el sentimiento de la multitud, trascendió en todo el mundo, y las naves se unieron en el camino a los Land’s End que ya se encontraban en el mar, como también a las fragatas HMS Yarmouth y HMS Broadsword que se encontraban en el Mediterráneo. Otra de las órdenes fue que un destacamento de la SBS zarparía en el HMS Conqueror este mismo lunes, aunque no hubo más detalles sobre su accionar.

Por otro lado, desde la escuadrilla 42 de la Real Fuerza Aérea emprendieron vuelo los aviones de reconocimiento Nimrod 1, aterrizando en la Isla Ascensión con el objetivo de apoyar en el aire a la fuerza naval mientras se desplazaba hacia el territorio. Asimismo, los miembros del 47° Escuadrón de Despacho Aéreo del Cuerpo Real de Transporte partieron de Inglaterra hacia la Isla Ascensión a bordo del Fearless.

Buques de guerra en Portsmouth, abril 1982.

En total, las fuerzas británicas desplegadas hacia el Atlántico Sur estuvieron compuestas por dos portaaviones, cuatro naves de apoyo, cinco fragatas y siete destructores. Más de 27.000 efectivos británicos partieron rumbo a Malvinas. 

Despliegue británico momentos antes de partir hacia Malvinas el 5 de abril de 1982. Fuente: BBC

La respuesta internacional

El mundo en sí mismo (casi en su totalidad) observaba lo acontecido en las Malvinas con una mirada de discernimiento hacia el accionar argentino. Países europeos no tardaron en adoptar medidas punitorias hacia la Argentina, como Austria congelando el envío de tanques a nuestro país, o la Comunidad Económica Europea respaldando la decisión británica de aplicar sanciones económicas contra Argentina. Al otro lado del Atlántico, Canadá replicaba el accionar europeo: no sólo congeló el envío de equipos militares comprados por nuestro país, sino que también amenazó con la aplicación de sanciones. 

Aquel 5 de abril, una parte del continente americano se pronunció con respecto a la movilización de tropas y a la recuperación de las Islas por parte de Argentina. Desde Chile, un diplomático estadounidense comunicaba que la postura oficial del país era de neutralidad, aunque consideraban la acción argentina como una “agresión alevosa” que precisaba ser balanceada con una respuesta internacional. Siguiendo la misma línea, Canadá replicaba el accionar europeo congelando el envío de equipos militares comprados por nuestro país y amenazando con la aplicación de sanciones económicas. 

Mientras tanto, Argentina prueba un movimiento más sobre el tablero y presenta al ministro de Relaciones Exteriores, Nicanor Costa Méndez, ante la asamblea de la Organización de Estados Americanos. El canciller postuló las tesis del Gobierno de Buenos Aires, mientras que Estados Unidos se mostraba reacio a responder en favor de la Argentina. El propio Ronald Reagan expresó cierta inquietud por la situación, reiterando la postura norteamericana en el Consejo de Seguridad y pidiendo la retirada de las tropas argentinas del territorio inglés. Perú fue el único país latinoamericano que ese mismo 5 de abril de 1982 definió su posición en favor de la Argentina.

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2 COMENTARIOS

  1. El gobierno Argentino esperaba que la reacción internacional fuera a favor nuestro para presionar a los ingleses a sentarse a negociar la descolonización de las islas. Error, el mundo en su mayoría repudió la acción Argentina calificándola de “agresión”. Lo que no se tuvo en cuenta es que el hemisferio occidental era socio o aliado británico de la OTAN. Lo que sí se temió es que la campaña de UK debilitara el poder de la defensa de la UE ante los soviéticos.
    La conclusión es que parece que no se evaluó cuál era la posición internacional de ambos países ante el mundo, uno era líder del primer mundo y el otro, en aquel entonces, era integrante del tercer mundo y poco conocido (Buenos Aires=Río de Janeiro) por más que Argentina recibiera apoyo de otras naciones no era suficiente para revertir la situación. De haber conocido cuál es la historia de Inglaterra y cuál es el perfil de sus gobiernos se hubiera sabido que nuestras oportunidades eran limitadas para conseguir un arreglo pacífico.
    De ninguna forma se desmerece el actuar de nuestros soldados o el derecho irrenunciable de nuestra soberanía, se hizo todo lo que estuvo al alcance de nuestra fuerza y más aún, se entregó la vida, posiblemente el sacrificio hubiera tenido más efecto si nuestro gobierno hubiera tenido en cuenta la situación general, estuvimos muy solos y se nos ocurrió algo muy arriesgado sin el suficiente apoyo.

  2. Antes de la guerra EEUU y Francia suministraron cazas A4 Skyhawk y Mirage III y Super Etendard, mas misiles Roland, Alemania submarinos clase 209 y EEUU destructores clase Fletcher e Inglaterra destructores clase 42, hay que volver a tener unas FFAA fuertes como entonces y utilizar al mismo tiempo la diplomacia.

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