Recientemente, bombarderos furtivos B-2 Spirit de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos pertenecientes al 509th Bomb Wing con asiento en Base Aérea Whiteman, Missouri, arribaron a Australia como parte del paquete asignado al Pacific Air Forces Bomber Task Force norteamericano.
Los bombarderos se desplegaron a la base australiana RAAF Amberley como parte de una Fuerza de Tarea de Bombarderos rotativa, en apoyo de la Iniciativa de Cooperación Reforzada bajo el Acuerdo de Postura de Fuerza entre los Estados Unidos y Australia. Los bombarderos se emplearán el B-2 para ejecutar misiones de entrenamiento y de disuasión estratégica con aliados y fuerzas conjuntas presentes en la región del Indo-Pacífico libre.
“Este despliegue del B-2 en Australia demuestra y mejora la preparación y la letalidad de nuestra fuerza de ataque penetrante de largo alcance”, dijo el teniente coronel Andrew Kousgaard, comandante del 393rd Expeditionary Bomb Squadron. “Estamos deseando entrenar y mejorar nuestra interoperabilidad con nuestros compañeros de la RAAF, así como con los socios y aliados de todo el Indo-Pacífico mientras cumplimos los objetivos de la PACAF”.
El Mando Estratégico de EE.UU. lleva a cabo habitualmente operaciones de la Bomber Task Force en todo el mundo como demostración del compromiso de EE.UU. con la defensa colectiva y para integrarse en las operaciones y actividades del Mando de Combate Geográfico. Hace poco menos de un mes fue el turno de los B-1B Lancer asignados al 34th Expeditionary Bomb Squadron provenientes de Ellsworth Air Force Base, Dakota del Sur. En esa ocasión, los bombarderos aterrizaron en la RAAF Darwin.
De acuerdo con lo informado por la Pacific Air Forces, la última vez que los B-2 se desplegaron en el área de responsabilidad de INDOPACOM como parte de una Bomber Task Force fue en agosto de 2020.
Imagen de portada: USAF – Tech. Sgt. Dylan Nuckolls