Desde hace unos días, las Fuerzas Armadas de Taiwán se encuentran abocadas en la ejecución de las maniobras anuales Han Kuang 2022. La fase activa del ejercicio militar se dio por iniciada el pasado 25 de julio, teniendo previsto finalizar el 29. La actividad operacional prevista a lo largo de estas jornadas incluye la participación de los diversos medios pertenecientes al Ejército, Fuerza Aérea, Armada y Guardia Costera, los cuales operan desde distintos puntos geográficos en el marco de una simulación que pone en acción el plan de defensa nacional ante una invasión simulada.
De acuerdo con lo expresado por el Ministro de Defensa de Taiwán, los simulacros se focalizan en probar la conservación y el mantenimiento de las capacidades de combate de las Fuerzas Armadas en caso de una invasión china a gran escala.
La fase naval de Han Kuang simuló la capacidad de defensa conjunta contra una invasión anfibia, operación para la cual se dispusieron 20 buques de la Armada y de la Guardia Costera, unidades que contaron con la cobertura aérea de cazas F-16V y Mirage 2000. Frente a la costa próxima a la base naval de Suao se pudo apreciar el accionar de medios aeronavales entre los cuales se dispusieron lanchas rápidas, corbetas, fragatas, destructores, submarinos, helicópteros ASW y aviones de patrulla marítima.
Como parte del simulacro de un ataque conjunto naval y aéreo del enemigo, la fragata clase “Cheng Kung” (Oliver Hazard Perry) ejecutó el lanzamiento de un misil superficie-aire SM-1MR mientras que cazabombarderos Mirage 2000 y F-16V Viper interceptaban objetivos aéreos con misiles Magic II y Sidewinder. La cobertura aérea la complementaron los destructores de la clase “Kee Lung” (Kidd).
Los aviones de patrulla marítima P-3C, helicópteros S-70C y lanchas rápidas de la clase “Ching Chiang” realizaron actividades antisubmarinas, obligando al submarino enemigo a salir a la superficie. Los buques participantes también efectuaron fuego con munición de guerra, ejercicio del cual participó uno de los catamaranes de la clase “Anping” pertenecientes de la Guardia Costera. Este patrullero de altura está armado con lanzacohetes múltiples Chen Hai, cañón de 20mm y misiles anti-buque HF-2/HF-3, tal como se pudo apreciar en las imágenes.
Como parte de Han Kuang 2022, aviones de combate de la Fuerza Aérea y helicópteros del Ejército fueron desplegados en las distintas bases aéreas desde las cuales operaron y ejecutaron actividades preparatorias. Una de la imágenes inéditas correspondió a los ejercicios de armado de cazas F-16 con misiles AGM-84 Harpoon, AIM-120 AMRAAM y AIM-9 Siewinder, lográndose apreciar algunos detalles de los hangares subterráneos de la base aérea de Chiashan. En el frente occidental, helicópteros de exploración OH-58D Kiowa Warrior aterrizaron en un parque desde el cual realizaron ejercicios de reabastecimiento en caliente y armado.
También se han utilizado los aviones de transporte C-130 Hércules, tanto para infiltrar personal de operaciones especiales mediante salto HALO/HAHO como para el traslado de personal militar responsable del mantenimiento de los aviones de combate, junto con equipos y suministros.
Taipei Times mencionó que uno de los aspectos destacados de los ejercicios Han Kuang 2022 es la participación por primera vez de los reservistas que han recibido un entrenamiento más largo e intenso, capacitación que se brindó en el marco del nuevo plan de formación a los fines de incrementar la preparación para el combate de las fuerzas de reserva de Taiwán.
Otro elemento operacional que debutó en Han Kuang fue la lucha contra la guerra de la información, sin duda una de las lecciones más recientes por lo que se está pudiendo apreciar con el conflicto en Ucrania. El Ministerio de Defensa de Taiwán publicó imágenes de soldados trabajando desde “vehículos de operaciones psicológicas de segunda generación”, realizando operaciones de información gracias al uso de diversos recursos audiovisuales.
Han Kuang 2022 se da en un contexto de constante tensión entre Taiwán y la República Popular de China, país que casi a diario pone a prueba la capacidad de respuesta y reacción de las Fuerzas Armadas taiwanesas con el despliegue en zonas adyacentes de medios aéreos y navales.
Una de las últimas polémicas ha incluido a los EE. UU. y la posible visita de la presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, la cual ha sido rechazada de plano y calificada por China como una provocación que tendrá consecuencias graves.
Imagen de portada: Ministry of National Defense ROC