Artículo inicialmente publicado en el Cuaderno de Derecho Internacional Número X “ISLAS MALVINAS” – Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de Córdoba – Instituto de Derecho Internacional Público y Derecho de la Integración – Córdoba, 2015
Introducción
El conflicto por las Islas del Atlántico Sur, comúnmente conocido como la “Guerra de las Malvinas”, fue un período de enfrentamiento militar entre la República Argentina y el Reino Unido de Gran Bretaña, que se extendió desde el 2 de abril de 1982 hasta el 14 de junio de ese mismo año.
El origen de dicho conflicto se remonta a varios siglos atrás (1), cuando la corona española hiciera las primeras reclamaciones ante Gran Bretaña, por la soberanía sobre ese territorio austral.
Posteriormente, y siendo ya la Argentina un país independiente (y reconocido sin reservas por Gran Bretaña), las desavenencias por la soberanía sobre las islas no solo que no mermaron, sino que, a partir del año 1833, el reino unido las usurpó, desapoderando a los habitantes que allí se encontraban.
Desde esa fecha y hasta 1982, y a pesar de los esfuerzos de la ONU en el siglo pasado, para que se le diera un corte definitivo a la situación, no se produjeron cambios sustanciales en torno al tema central: el de la soberanía. Producto de ello, el día 2 de abril del año 1982 tropas argentinas desembarcaron en las Islas Malvinas.
La “Operación Rosario” (2) consistió en una serie de acciones de baja intensidad, efectuadas con la premisa de que la incursión fuera incruenta, y cuyo objetivo era el de tomar la capital, Puerto Stanley, la que pasó a denominarse “Puerto Argentino”.
El desembarco argentino se realizó sin causar ninguna muerte ni a los británicos ni a los “kelpers”; por contrapartida, las tropas gauchas sufrieron su primera baja (3). Como consecuencia del conflicto armado que finalizó el 14 de junio, murieron 649 militares argentinos, 255 británicos y 3 kelpers (4).
Entre los países que apoyaron a la Argentina durante el conflicto, se pueden distinguir entre aquellos que apoyaron materialmente a nuestro país, tales los casos de: Israel, Libia (5) y Perú, por ejemplo; y la situación de aquellos estados que brindaron apoyo diplomático como: Perú, Venezuela, Cuba, Brasil, Nicaragua, República Dominicana y Panamá (6). Cómo se puede apreciar, Perú fue un estado que ayudó a la Argentina en ambos aspectos. en este trabajo nos avocaremos, principalmente, al estudio de la ayuda prestada por el Perú a la Argentina, tanto en el plano material, como en el diplomático, teniendo en cuenta, además, que dicha ayuda fue siempre desinteresada.
En la primera parte, dedicaremos el estudio al análisis de la ayuda de material bélico ofrecido por el país incaico a la Argentina (a través de una triangulación con Israel); luego, en la segunda parte, y dentro de las soluciones diplomáticas que se buscaron para evitar o morigerar el conflicto armado, analizaremos la mediación del Presidente del Perú, arquitecto Fernando Belaúnde Terry (7), para, finalmente, examinar los buenos oficios del Secretario general de la ONU, el peruano Dr. Javier Pérez de Cuéllar (8).
Desde ya, deberemos aclarar, aunque parezca una obviedad, que en el caso del Secretario general Pérez de Cuéllar, más allá de su nacionalidad peruana y en virtud de lo establecido en el artículo 100 de la carta de la ONU, sus funciones fueron exclusivamente internacionales (9) y por lo tanto, como todo Secretario general, su actividad fue siempre reputada como imparcial.
Lo cierto es que, durante el conflicto por las Malvinas, el Perú, a través de sus Fuerzas Armadas o de sus hombres, buscó siempre alguna forma para auxiliar a la Argentina ante tan dramática situación.
La Actuación del Perú en concreto
La Ayuda Material
Las acciones bélicas comenzaron en las Malvinas el día 1 de mayo de 1982 (10). La resolución 502, el consejo de Seguridad (11) a la par que declaraba que existía un: “quebrantamiento de la paz”, exigía: “…la retirada inmediata de todas las fuerzas argentinas de las Islas Malvinas (Falkland Islands)” (12).
Ante este marco diplomático favorable a su posición, la Premier británica Margaret Tatcher (13), ordenó la movilización inmediata de la “Task Force” (14), para recuperar las Malvinas. Por otra parte, la comunidad económica europea (CEE), había decretado un embargo de armas contra la Argentina (14 Bis). Estados Unidos, asimismo, y aunque de manera más solapada, comenzó a limitar sus relaciones bilaterales con el estado sudamericano.
En este contexto internacional tan complicado, Argentina debió salir a buscar armamento, repuestos y pertrechos para sus tropas en otros países.
Hacia comienzos de mayo de 1982, miembros de la Fuerza Aérea Argentina tomaron contacto en Buenos Aires con funcionarios la empresa de origen israelí “Isrex Argentina”, que era la representante de las fábricas militares de ese país.
Los integrantes del directorio de la empresa estaban dispuestos a ayudar a la Argentina en su pedido de provisiones militares, pero al ser un tema tan delicado, sobre todo por el embargo decretado contra Argentina, pidieron autorización a la casa matriz, situada en Tel Aviv.
El Primer ministro Menájem Beguín (15), enterado del asunto, no solo que autorizó las transacciones, sino que expuso su franco apoyo a la causa argentina. Pero ¿por qué el Jefe de estado israelí se mostró tan proclive a la causa argentina?
Sucede que Beguín sentía un particular desprecio por los británicos, incluso desde antes que Israel se conformara como estado. Su rechazo hacia el Imperio británico venía de larga data: Dov Gruner, amigo y subalterno suyo en la organización “Irgún tzvai leumí” (16) había sido ahorcado por las autoridades británicas años antes (17).
“Beguín no había olvidado, aun cuando hubiera pasado casi medio siglo, ni el actuar de los británicos, ni las palabras finales de Dov: ‘si por algo lamento verdaderamente que esté por concluir mi vida, ello es, sobre todo, porque no he alcanzado a actuar bastante, no pude hacer suficiente’. Beguín tenía por entonces, 1982, sesenta y ocho años…sabía que el pedido…para venderles a los argentinos las armas que pedían, era probablemente su última oportunidad de vengarse de los británicos. Y lo fue” (18).
Por pedido del Premier israelí y para aventar cualquier sospecha, este solicitó que las compras fueran trianguladas a través de un tercer estado; y el país que se ofreció para tan arriesgada tarea resultó ser Perú.
“Perú aceptó, de buen grado, el pasar por destinatario de tales envíos, firmando las órdenes de compra en blanco y certificados de destino final, que se necesitaban para concretar los envíos” (19).
A pesar de las protestas formales presentadas por Gran Bretaña (20), ante la evidencia de la triangulación de armas, Beguín negó cualquier relación con el asunto y los envíos siguieron.
Paralelamente, Argentina solicitó al Perú ayuda material directo. El 2 de mayo de 1982, el presidente Galtieri (21) le pidió a su par de Perú, que recibiera a tres representantes, entre los cuales se encontraba el embajador argentino en Lima, Sánchez Moreno (22).
Argentina requería a Perú aviones, misiles y hasta embarcaciones. El Secretario de la Presidencia del Perú en aquellos días, García Belaúnde (23), sobre la reunión comentada recuerda que los enviados argentinos: “estos se presentaron ante Belaúnde al día siguiente. Llegaban para pedir armamento. ‘Se les dio lo que se podía. Pidieron aviones Mirage, Sukhói, submarinos, buques, misiles, entre otras armas’.
No se les envió los Sukhói, pues el Perú era el único que los tenía en la región, por lo que iba a quedar en evidencia que estaba ayudando a Argentina.
En cambio, al día siguiente de la visita de los emisarios se enviaron diez aviones Mirage, a los que se les borró las banderas peruanas para reemplazarlas por las argentinas. Estos partieron de Chiclayo rumbo a la base militar de la Joya, en Arequipa. Luego siguieron hacia la provincia argentina de Jujuy y de ahí a Tandil. El uso de esta ruta evitó que fueran detectados por los radares chilenos.
Las embarcaciones que pedía Argentina no fueron entregadas, pues estas necesariamente pasarían por chile y serían detectadas por los radares de ese país.
También se les envió misiles tierra-tierra y tierra-aire. Además de tanques de combustible para los Mirage, para que estos tengan una mayor autonomía de vuelo en sus incursiones a las Malvinas” (24).
Pero el compromiso peruano no se limitaría solamente al ofrecimiento de material bélico. Pilotos de ese país se ofrecieron como voluntarios para combatir al lado de los argentinos:
“Los aviones, que ya estaban pintados con las insignias argentinas, llegaron al país luego de una travesía de tres horas y, desde allí, los transportaron hasta la base de Tandil. ‘la transferencia se hizo en el aeropuerto de Salta. Los piloteaban los peruanos y ellos querían seguir y presentarse de voluntarios en la guerra de Malvinas. les dije que no…, afirma Lami Dozo” (25).
Los pedidos de Argentina al Perú no se detuvieron en estas operaciones reseñadas. También existió la denominada “Operación Exocet”, para la compra de misiles.
Atento el embargo de armas decretado contra la Argentina, un grupo de militares rioplatenses hicieron contacto en Washington con el General de la FAP (26) José Espinoza Salazar, para comprar 12 misiles, por medio del estado peruano. Los argentinos ofrecieron u$d 12 millones.
A partir de ese momento se elaboró la llamada directiva “Celeste y Blanco”, cuyo objetivo era concretar la compra de las armas. El 7 de junio se autorizó la operación, calificada como secreto de estado. Los misiles nunca llegaron, debido a que cuando estuvieron listos para ser utilizados, el conflicto ya había terminado (27).
La mediación del presidente Belaúnde Terry
Ante el fracaso que ya se vislumbraba en la intervención diplomática del Secretario de Estado de los Estados Unidos, Alexander Haig (28), el presidente del Perú, Belaunde Terry, le comunicó al embajador de los Estados Unidos en Lima (29), su voluntad de actuar como mediador en el conflicto.
Enterado Haig de estas gestiones, avaló a Belaúnde para que Interviniese como mediador (30). El mandatario incaico se comunicó con su par argentino, Galtieri, en la madrugada del 2 de mayo de 1982. Algunas partes textuales de ese primer diálogo son las que siguen:
- “Galtieri: con gran placer he recibido su comunicación, doctor Belaúnde Terry.
- Belaúnde Terry: es mi deber decirle que he creído ver en el secretario de estado una honda preocupación por una cierta intransigencia del otro lado, ¿no?
- Galtieri: y, lo que pasa, doctor, es que nosotros no vamos a cambiar. ustedes votaron (la resolución) del TIAR. Nosotros no vamos a cambiar la soberanía por nada, doctor, eh… mire doctor, en Argentina, después de ciento cincuenta años, un año o dos no le preocupa. Lo que me preocupa es que no sea un año, sino ciento cincuenta años más…
- Belaúnde Terry: Bueno, sí nosotros estamos ahí, usted puede estar seguro, general, de que haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que los justificados propósitos de su gobierno se cumplan plenamente” (31).
Luego, Belaúnde Terry le pasó a informar sobre los puntos de su propuesta a Galtieri, los que consistían en:
- Cese inmediato de las hostilidades.
- Retiro mutuo y simultáneo de fuerzas.
- Presencia de representantes ajenos a las partes involucradas en el conflicto para gobernar las islas temporariamente.
- Los dos gobiernos reconocerían la existencia de posiciones discrepantes sobre la situación de las islas.
- Los dos gobiernos reconocerían que los puntos de vista y los intereses de los habitantes de las islas, deberían ser tomados en cuenta en la resolución definitiva del problema.
El grupo de contacto que intervendría de inmediato en las negociaciones para implementar el acuerdo estaría compuesto por: Brasil, Alemania Federal, EE. UU. (32) y Perú. Antes del 30 de abril de 1983 se debería llegar a un acuerdo definitivo, bajo la responsabilidad del grupo de países anteriormente mencionados.
Luego de analizada la propuesta en Argentina, el canciller Costa Méndez (33) tomó personalmente las riendas en el asunto, habiéndose comunicado con lima varias veces en esos días.
El tema central de la discusión para llegar a un acuerdo definitivo era que, a cualquier propuesta a la que se arribase, no debería figurar la palabra “intereses” de los kelpers, sino solamente debía aparecer la palabra “deseos” de los isleños. Costa Méndez, sobre este punto, le respondió al Presidente del consejo de ministros del Perú, Manuel Ulloa (34):
“Hemos estado diecisiete años luchando por este tema en Naciones unidas…Vos te das cuenta de que no podemos dejar librada la determinación de la soberanía sobre las islas al voto de habitantes que han sido impuestos, que han sido empleados de la compañía, que la podemos comprar mañana y se acabó el asunto” (35).
Cuando todo parecía encaminarse hacia una solución diplomática del conflicto, un episodio crucial en la guerra habría de cambiarlo todo: el hundimiento del crucero ARA General Belgrano el 2 de mayo, por parte del submarino británico HMS Conqueror, fuera de la zona de exclusión determinada por los propios británicos.
“A las 15:57 de ese día fatal…, el capitán Chris Wreford Brown, comandante del ‘Conqueror’, se comunicó con Northwood para informar estas novedades y requerir instrucciones. el gabinete de crisis, presidido por Margaret Tatcher, tomó la decisión e impartió la siguiente directiva: disparen hasta hundirlo. El capitán Wreford Brown no podía dar crédito a la orden que se le estaba impartiendo, al extremo que se la hizo repetir tres veces, hasta comprender cabalmente las intenciones de sus superiores…” (36).
¿Cuáles podrían haber sido las verdaderas motivaciones británica para perpetrar este acto contrario a las leyes de la guerra? (37). Resulta inescindible vincular el hundimiento del Belgrano- episodio militar- con el fracaso de las negociaciones del presidente Belaúnde Terry- hecho político:
“Por consiguiente, las motivaciones para adoptar tal decisión no fueron ciertamente militares, algo debió ocurrir entre el 30 de abril y el 02 de mayo, que obligó al poder político británico a adoptar una medida que le valió la repulsa del mundo, y un elevado costo político consecuente” (38).
Sin embargo, y a pesar de la conmoción por el hundimiento del Belgrano, el gobierno argentino decidió seguir adelante con la mediación del presidente peruano. El canciller Costa Méndez insistió en que la inclusión de la palabra “deseos” de los habitantes en cualquier negociación, era inaceptable:
“Luego de intercambiar opiniones, quedó definido que Argentina aceptaba la expresión: ‘the view concerning the intrest’ (los puntos de vista concernientes a los intereses). Por último, el canciller objetó la presencia de EE. UU. entre los países integrantes del grupo de contacto e indicó que la propuesta de siete puntos podría ser aceptable en la medida que aclarara expresamente que la administración británica no sería reinstalada” (39).
El día 2 de mayo a la siesta, el presidente del Perú telefoneó nuevamente a su par de Argentina para conocer los avances sobre su propuesta. Galtieri le respondió que no podía darle una respuesta definitiva en ese momento, pero que a la medianoche seguramente ya la tendría, para agregarle que los EE. UU. no podrían integrar ya, ningún grupo de contacto:
“El presidente Belaúnde recomendó que, en la medida de lo posible, no se tratara de modificar el texto, puesto que, ‘yo tengo la impresión de que ese texto puede prosperar y que, en todo caso, los americanos lo hacen suyo, eso es vital, porque desde luego, la influencia de ellos sobre los ingleses es definitiva“(40).
A las 00:30 hs. del 3 de mayo, Galtieri se puso en contacto con Belaúnde Terry para hacerle conocer la decisión argentina, que era la de seguir negociando, a pesar de los obstáculos británicos para arribar a una solución pacífica:
“Más allá de que los puntos, o los siete puntos, podrán ser en algunos aspectos reconsiderados y tratados, arquitecto, pero le vuelvo a repetir, si bien estamos reconsiderando algunos aspectos de redacción de los siete puntos, la noticia del crucero General Belgrano dejó de lado ya todo estudio y razonamiento para apoyarle en este hecho que es trascendente, psicológica y políticamente, más allá de lo militar, en el público de la Nación Argentina” (41).
A su vez, el presidente peruano dejó entrever a su par argentino que el Secretario de Estado Haig, había variado en su conducta. Le manifestó que había notado en el funcionario estadounidense una cierta frustración, debido a que el canciller británico Pym (42), no tenía ninguna intención en lograr la paz y sí, de obtener con la dilación del tiempo, mayores beneficios para la Task Force.
Galtieri le respondió que atento el cariz que habían tomado los acontecimientos, la mediación debía entrar en un período de paralización. Simultáneamente, el gobierno argentino envió una comisión (43) a Lima para poner en conocimiento del presidente peruano el estado de las negociaciones: para la Argentina, la propuesta de los siete puntos no había quedado suspendida, sino directamente rechazada (44).
El 04 de mayo, la comisión regresó del Perú, para exponer los contenidos principales de su cometido, notando que se podía apreciar una marcada influencia de los EE.UU. en toda la gestión encarada por Belaúnde; un aparente renovado interés británico por la propuesta peruana; y, finalmente, que dicho interés coincidía con la gestión iniciada por el Secretario general de la ONU y la escasa predisposición de Gran Bretaña para concurrir a ese organismo internacional (45).
A las 23:50 del 05 de mayo, el presidente del Perú se comunicó con el Gral. Galtieri, para transmitirle un mensaje esperanzador:
“Yo tengo una versión y la razón de mi llamada es esta. Gral. es hacerle conocer a usted…las ideas del gobierno británico, que ellos nos han hecho llegar indirectamente, porque ha sido por intermedio de EE. UU., una reacción por la que ellos estarían dispuestos a considerar…Vea ud. el documento que yo les pasé…ellos han reaccionado al documento. en general, hay aceptación, lo hace un poco más conciso, porque lo bajan de 7 a 6 puntos, pero le dan algunos cambios de redacción” (46).
Más allá de algunos cambios propuestos por el Reino Unido, Belaúnde habló además de un cronograma tentativo, por el cual se debían dar órdenes e instrucciones para el cese al fuego en el término de 24 horas, más otras 48 horas más para iniciar la desmilitarización de la zona (47).
Belaúnde concluyó su llamada a Galtieri, diciéndole:
“Eso sería, en líneas generales, lo que me dicen del Departamento de Estado (de EE. UU.), que Inglaterra aceptaría. yo quiero, simplemente transmitírselo, porque nosotros hemos estado en contacto, y yo tengo el propósito mejor de servir a la causa de la paz. Quiero que ud. tenga toda la información que pueda llegar a mí, por distintos conductos” (48).
Ese mismo 05 de mayo en horas de la noche, Argentina le hizo saber al presidente del Perú que había aceptado la intervención del Secretario General de la ONU, y que llevaría las negociaciones a ese foro internacional.
“A partir de esa fecha y cuando las partes habían aceptado la gestión de la ONU a través del Secretario General, la propuesta del Perú quedó anulada, aunque no así los ponderables esfuerzos de esta país para llevar la disputa a una solución negociada, apoyando la posición argentina en todas las formas compatibles con sus intereses” (49).
Los buenos oficios del Secretario General, Pérez de Cuéllar
Durante el mes de abril, las gestiones diplomáticas argentinas se habían centrado, casi exclusivamente, en analizar las propuestas del Secretario de Estado de los estados unidos, Alexander Haig.
Ante el fracaso de la aplicación del TIAR y el posterior apoyo de los Estados Unidos a Gran Bretaña (50), la Argentina creyó necesario, entablar negociaciones diplomáticas en otros foros internacionales. Galtieri solicitó el día 01 de mayo, una reunión del COMIL (51) para evaluar los pasos a seguir. Dentro de las opciones, se barajó la posibilidad de concurrir ante la ONU, debido a que en la OEA (52), los resultados no habían sido los esperados (53).
El día 02 de mayo, el representante argentino ante la ONU, Dr. Roca, solicitó a la cancillería de su país, autorización para concurrir a una entrevista solicitada por el Secretario General.
El Dr. Roca elevó un informe sobre la propuesta del Secretario, el que en lo sustancial decía: a) que en pocas horas más se reuniría con el ministro Pym, a quien entregaría una propuesta para que fuese considerada por Londres; b) que debido a su investidura, no podía estar ajeno al conflicto y que se consideraba obligado, en virtud del artículo 40 de la carta, a ofrecer una propuesta de solución pacífica a las partes.
Asimismo, Pérez de Cuéllar le entregó un “Ayuda memoria” al representante argentino, el que fue recibido el 02 de mayo en horas de la noche, en Buenos Aires.
A través de un “Acuerdo Provisional”, el Secretario General proponía (54):
I. 1. El ámbito geográfico dentro del cual deberá cumplirse el retiro de las tropas abarca las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur.
- 2. El retiro de las fuerzas de ambas partes deberá ser gradual y simultáneo. en un plazo máximo de treinta días todas las fuerzas armadas deberán hallarse en sus bases y áreas normales de operación.
- II. A partir de la firma del presente Acuerdo cada parte dejará sin efecto las medidas económicas que haya adoptado en contra de la otra y el reino unido solicitará igual conducta de los países o grupos de países que, a su pedido, adoptaron medidas similares.
- III. 1. la supervisión del retiro de las fuerzas de ambos países será llevada a cabo por personal especializado de las Naciones unidas, integrado con la conformidad de las partes.
2. la administración interina de las islas mientras se realizan las negociaciones para la solución definitiva de la disputa, se ajustará a las siguientes disposiciones:
- A) la administración estará exclusivamente a cargo de las Naciones unidas con presencia adecuada de observadores de las partes.
- B) dicha administración desempeñará todas las funciones (ejecutivas, legislativas, judiciales y de seguridad) con funcionarios de nacionalidad distinta a la de las partes.
- C) No obstante lo manifestado en 2.A) y b) y a efectos de no producir alteraciones innecesarias en el sistema de vida de la población, durante el periodo de administración interina por parte de Naciones unidas, las funciones judiciales locales podrán ser ejercidas de conformidad con la legislación vigente al 1° de abril de 1982 en todo aquello que resulte compatible con el presente acuerdo.
- Del mismo modo la administración interina de las Naciones unidas podrá nombrar asesores a personas integrantes de la población de origen británico y a argentinos residentes en las islas en igual número.
- D) Las banderas de las partes flamearán junto a la de las Naciones Unidas.
- E) Durante el periodo de administración interina las comunicaciones se mantendrán abiertas, sin restricción discriminatoria de naturaleza alguna para las partes, incluyendo la libre circulación, igualdad para el acceso en materia de residencia, de trabajo y de propiedad.
- F) La facilidad de comunicaciones incluirá además el mantenimiento del libre tránsito de líneas Aéreas del estado (LADE) y de buques mercantes y científicos, como así también continuará la libre operación de las comunicaciones telefónicas, telegráficas y télex, y transmisiones de televisión argentinas y la libre operación de los servicios de yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) y gas del estado.
IV. Las costumbres, tradiciones, estilo de vida de los habitantes de las islas, así como sus vínculos sociales y culturales con sus países de origen serán respetados y salvaguardados.
V. 1. las partes se comprometen a emprender de inmediato negociaciones de buena fe bajo los auspicios del Secretario general de las Naciones unidas, para la solución pacífica y definitiva de la disputa y con sentido de urgencia completar estas negociaciones antes del 31 de diciembre de 1982, con una única opción de prórroga hasta el 30 de junio de 1983, para cumplir con la carta de las Naciones unidas, las resoluciones 1514 (XV), 2065 (XX) y las demás resoluciones pertinentes de la Asamblea general sobre la cuestión de las Islas Malvinas. estas negociaciones se iniciarán sin perjuicio de los derechos y las reclamaciones o las posiciones de ambas partes y reconociendo que ellas tienen posiciones discrepantes en torno de la cuestión de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur.
- 2. Las negociaciones se realizarán en la ciudad de Nueva York.
- 3. El Secretario General de las Naciones Unidas podrá ser asistido en las negociaciones por un grupo de contacto formado por representantes de cuatro estados miembros de las Naciones unidas. A tal efecto cada una de las partes propondrá dos estados y tendrá derecho a vetar por única vez a uno de los estados propuestos por la otra.
- 4. El Secretario General de las Naciones Unidas mantendrá asiduamente informado al consejo de Seguridad sobre la marcha de las negociaciones.
VI. Si expirado el plazo fijado en el inciso 1 del punto V supra no se hubiere alcanzado un arreglo definitivo, el Secretario general elaborará un informe dirigido a la Asamblea general de las Naciones unidas, a fin de que esta determine, según corresponda y con la mayor urgencia, las pautas a que deberá ajustarse dicho arreglo definitivo de manera de lograr una rápida solución de la cuestión.
El día 05 de mayo, Argentina aceptaba formalmente la gestión del Secretario General (55). Gran Bretaña, a través del ministro Pym negaba haber comenzado reuniones con Pérez de Cuéllar, lo cual era falso, ya que el Secretario General le había entregado al diplomático un “Ayuda Memoria” similar al que le facilitara a la Argentina (56). Sin embargo, y ante la evidencia de los hechos, el Reino Unido dio una respuesta verbal al “Ayuda memoria” del Secretario General, e incluía diez comentarios, realizados también de manera verbal.
Pérez de Cuéllar aguardaba la llegada de los diplomáticos argentinos a la ONU, para conocer sus impresiones sobre los diez puntos británicos.
El 09 de mayo, el Embajador Ros, de Argentina (57) fue invitado a la residencia del Secretario General en Nueva York, en donde este último le impuso sobre los avances en las tratativas de negociación, y, sobre todo, en las conversaciones que previamente había mantenido con el embajador británico (58).
El Secretario General le hizo conocer una fórmula, la que debía entenderse como parte de un todo. la fórmula establecía:
“Las partes se comprometen a emprender de buena fe negociaciones bajo los auspicios del Secretario general para la solución pacífica de sus diferencias y a procurar con sentido de urgencia completar estas negociaciones antes del 31 de diciembre de 1982. estas negociaciones serán conducidas sin perjuicio de los derechos, las reclamaciones o las posiciones de las partes y sin prejuzgar su desenlace” (59).
El 13 de mayo, y ante la dilación británica en dar una respuesta concreta al Secretario General, este proponía el día sábado 15 de mayo, como fecha tope para que las partes llevaran sus propuestas.
Luego, el Secretario General las analizaría y presentaría su propuesta. A las 48 horas de recibida, si las partes no daban una respuesta satisfactoria, Pérez de Cuéllar daría por finalizada su gestión.
El 17 de mayo, Gran Bretaña hizo entregó su propuesta al Secretario General. Fue este el primer documento formal y escrito, presentado por el reino unido, desde que comenzaron las negociaciones (60).
En resumen, la propuesta británica sostenía que: a) el ámbito geográfico del acuerdo estaría limitado a las Islas Malvinas (se excluía a las Georgias y Sándwich del Sur); b) hacía referencia al Art. 73 de la carta de la ONU, referido a los territorios no autónomos, lo que significaba la posibilidad de un gobierno propio (con exclusión de autoridades argentinas) para las Islas Malvinas, etc. Lo más grave de la propuesta, es que había sido calificada por los británicos como “definitiva y no modificable”, dejando un margen casi nulo para cualquier negociación, a diferencia de la proposición argentina, que era modificable.
El día 19 de mayo, el Secretario General se comunicó con el presidente Galtieri, para informarle que el reino unido había dado por finalizadas las conversaciones, pero que esto no implicaba la finalización de sus esfuerzos para encontrar una solución pacífica a la cuestión, ya que entre otras posibilidades, quedaba todavía el recurrir al consejo de Seguridad. Pérez de Cuéllar le señaló al presidente argentino:
“Sé que los británicos consideran que la negociación está terminada para ellos, pero no está terminada para mí, porque yo, como Secretario general de las Naciones unidas no tengo en mira el interés de ninguna de las partes, sino el interés de la paz; entonces mis esfuerzos deben continuar mientras haya alguna posibilidad de paz… yo me había permitido sugerir la posibilidad de enviar unos funcionarios nuestros para que discutan, eventualmente con ud. si fuera el caso, esas fórmulas que nosotros pensábamos que podían resolver los problemas que están pendientes, que no son tan graves como parecen ser” (61).
Ante la intransigencia del Reino Unido, y pese a sus denodados esfuerzos por evitar el conflicto armado, el Secretario General expuso y notificó al consejo de Seguridad el día 20 de mayo, que daba por concluidas sus gestiones (62).
Caía de esta forma el último intento por encontrar una solución diplomática a un conflicto bélico, que habría de extenderse un tiempo más todavía.
El día 26 de mayo, el consejo de Seguridad emitía la res. 505 (1982), en la cual reconocía los esfuerzos del Secretario General para lograr una acuerdo entre las partes, le solicitaba que continuara con sus buenos oficios, exhortaba a las partes para que pusieran fin a las hostilidades, pedía al Secretario general que entablara negociaciones con las partes para las condiciones de un cese al fuego, y, finalmente, le peticionaba a Pérez de Cuéllar que presentara en el término de tres días, un Informe Provisional (63).
Conclusiones
En este trabajo no hemos analizado casi ninguna situación vinculada con la guerra en sí; excepto una: el hundimiento del crucero ARA General Belgrano, fuera de la zona de exclusión, decretada por el gobierno británico (64).
El motivo por el cual le hemos dado una relevancia especial, es que este acto de guerra, trascendió lo militar y fue provocado, ex profeso, por el gobierno de Tatcher, para frustrar las negociaciones que venía llevando el presidente Belaúnde Terry.
Hasta ese momento, las perspectivas para lograr la paz eran altamente probables. Argentina había logrado que se sacara del acuerdo la palabra “deseos”, porque podía implicar un reconocimiento tácito a la “autodeterminación” de los kelpers. en su reemplazo se utilizaría el vocablo “intereses” de los isleños. todo parecía encaminarse hacia una solución pacífica.
Tan cerca se estuvo de lograr un entendimiento (65), que el presidente Belaúnde Terry el 1 de mayo, un día antes del hundimiento del ARA General Belgrano, había convocado a una conferencia de prensa para las 18 horas en lima, en la que anunciaría al mundo la firma de un tratado de Paz Argentino-británico (66).
“Este hecho sirve para recalcar que los móviles de la decisión respecto del crucero argentino, hay que buscarlos en lo inmediato, no más allá de las treinta horas anteriores a su hundimiento…y las horas próximas inmediatas, en que se decidían las negociaciones de la gestión del Presidente del Perú. Algo debió ocurrir, en ese lapso, lo suficientemente decisivo para arriesgar el apoyo político y diplomático concedido por los EE.UU., la CEE y el consejo de Seguridad de la ONU a Gran Bretaña.
Ni el gobierno ni el Parlamento británico han explicado- ni al mundo ni a su propio pueblo- las poderosas razones que seguramente tuvieron, para perpetrar el acto de referencia”(67).
A Belaúnde Terry, también se la ha endilgado el hecho de haber sido demasiado condescendiente con las sugerencias del Secretario de Estado de EE.UU. Haig, durante las negociaciones. Lo cierto es que en aquellos primeros momentos (68), ninguna solución pacífica parecía viable, si no se contaba con el visto bueno aquel poderoso país del norte de América.
Hemos tratado de exponer, dentro de las limitaciones propias impuestas por este trabajo, cómo el estado peruano intentó por todos los medios, ayudar a la Argentina durante el conflicto por las Islas Malvinas.
Vimos cómo esa ayuda fue material, como el ofrecimiento de material bélico; humana, tales los casos de los pilotos de la FAP que querían combatir junto a sus pares argentinos; o diplomática, ya fuera a través del Presidente de la república Belaúnde Terry, o del Secretario General de la ONU, Pérez de Cuéllar.
Pero el acompañamiento y apoyo peruano a la causa Argentina no concluyó en 1982.
Desde lo simbólico, hasta en las acciones concretas, diplomáticas o políticas, el involucramiento del Perú en la cuestión de las Malvinas, lo ponen a la cabeza como el país que más ha hecho por coadyuvar al reconocimiento argentino de sus derechos soberanos en aquella zona austral del continente americano.
Desde lo simbólico, y a modo de ejemplo, vale la pena mencionar que la Compañía de Comandos “chorrillos”, en Lima, Perú, lleva el nombre del Sargento Primero Mario “Perro” Cisnero, uno de los combatientes argentinos más aguerridos, muerto en las postrimerías de la guerra de las Malvinas (69). Cisnero fue declarado, además, “héroe Nacional”.
Desde lo diplomático y político, el 31 de enero del año 2012 se conformó en lima, el “grupo Peruano de respaldo y Solidaridad a la Soberanía Argentina en las Islas Malvinas” (70).
Entre sus objetivos se proponen: apoyar a la Argentina en sus reclamos por la soberanía en las islas; instar al consejo Andino de ministros de relaciones exteriores para que respalde esos reclamos; proponer al congreso peruano para que se pronuncie en idéntico sentido, a través de una moción multipartidaria; exhortar a la comunidad internacional para que se haga efectivo el cumplimiento de las resoluciones de la ONU, en lo relativo al tema Malvinas, etc. (71)
El congresista peruano, Víctor Andrés García Belaunde, testigo directo de los acontecimientos de 1982 como lo hemos descripto en otra parte de este ensayo, es probablemente la persona que más ha trabajado y sigue trabajando, por la causa Malvinas.
Recientemente fue invitado por la gobernadora de Tierra del Fuego a dictar una conferencia en Ushuaia, denominada: “Perú en las Malvinas: Hermandad que trasciende el tiempo” (72).
En su exposición, García Belaúnde puso de manifiesto los lazos de hermandad y amistad que unen a las dos naciones. recordó a sus oyentes que las Malvinas, antes de la creación del Virreinato del río de la Plata, formaban parte del Virreinato del Perú.
Para finalizar, queremos rendir un pequeño homenaje a todo el pueblo peruano, que en solidaridad con la Argentina, tomó la “causa Malvinas”, como algo propio, sin esperar recompensa alguna.
Para ello, no se nos ocurren mejores palabras para el cierre, que las que pronunciara el libertador de Argentina, chile y Perú, el día de la Proclamación de la Independencia de esta última nación (73).
Ojalá estas expresiones, paráfrasis mediante, un día puedan ser aplicadas a las Islas Malvinas:
“El Perú es desde este momento libre e independiente, por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa, que dios defiende. ¡Viva la Patria! ¡Viva la libertad! ¡Viva la Independencia! (José de San Martín)”.
Notas
- 1) Para un examen pormenorizado sobre la cuestión, puede consultarse la obra: Drnas de Clément, Z. “Malvinas ¿el derecho de la Fuerza o la Fuerza del derecho?”, Marcos Lerner, córdoba, Argentina, 1999.
- 2) Nombre dado al desembarco argentino, en honor a la Virgen maría.
- 3) Se trataba del capitán de corbeta, Pedro Edgardo Giachino. el militar recibió, post mortem, la cruz al heroico Valor en combate.
- 4) los números definitivos, no se saben con certeza, ya que el gobierno británico, a través del “Acta de Secreto militar”, dispuso que, hasta el 14 de junio del año 2072, 90 años después de la guerra, no se divulguen las cifras definitivas de sus bajas. de todas maneras, la cifra de 255 muertos que reconocen oficialmente parece bastante exigua.
- 5) Argentina envió una misión secreta a aquel país con el objetivo de conseguir material bélico. Los enviados de Galtieri, se entrevistaron con el vicepresidente libio, Abdul Salam Jellud. En un avión de Aerolíneas Argentinas se trasladaron los misiles, cohetes, morteros, municiones varias, minas antitanque y antipersonal. el presidente Kadafi solicitó a cambio, asesoramiento profesional argentino para desarrollar una central nuclear. Galtieri le envió al líder libio, un caballo blanco de pura raza.
- 6) Sería muy difícil poder establecer con precisión el grado de apoyo de cada uno estos y otros países, que se solidarizaron con la causa Argentina. A esa lista, habría que agregar a la entonces unión Soviética, Uruguay, España y Brasil, entre otros. Por contrapartida, tomaron una posición a favor de Gran Bretaña, países como Chile, Colombia y Trinidad y Tobago. De los estados europeos, Francia fue el aliado más cercano del Reino Unido.
- 7) Belaúnde Terry (1912-2002), presidente del Perú desde el 28 de julio de 1980 y hasta el 28 de julio de 1985.
- 8) Pérez de Cuéllar fue Secretario General de la ONU desde enero de 1982 y hasta diciembre de 1991.
- 9) Artículo 100, inc. 2.
- 10) En lo que se conoce como el “bautismo de fuego” de la Fuerza Aérea Argentina. hecha la salvedad, de que, como lo destacamos más arriba, la primera acción bélica, se produjo el mismo día del desembarco argentino, el 2 de abril, con la muerte del capitán de Fragata Giachino.
- 11) De fecha 3 de abril de 1982. Fue aprobada por 10 votos a favor (Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Irlanda, Japón, Jordania, Uganda, Togo, Zaire y Guyana), contra 1 (Panamá) y 4 abstenciones (China, Unión Soviética, Polonia y España). La diplomacia argentina de entonces creyó, erróneamente, que los países “No Alineados” votarían a favor de la posición del país sudamericano y en contra del colonialismo. También la cancillería especuló con la posibilidad de que la unión Soviética ejerciera su derecho de veto. Ninguna de las dos hipótesis se concretó. Véase: http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=S/reS/502%20(1982)
- 12) Apartado 2.
- 13) Margaret Tatcher (1925-2013), fue Primer ministro del Reino Unido entre 1979 y 1990.
- 14) Su significado se puede entender como: “Fuerza operativa” o “Fuerza de tareas”.
- 14 Bis) Francia apoyó decididamente a su aliado regional, Gran Bretaña, brindándole información de vital importancia, tanto sobre los aviones “Super Etendard”, de origen galo, que había comprado la FFAA argentina, como, asimismo, le facilitó datos cruciales sobre los misiles “Exocet”, ya que nunca se habían utilizado hasta ese momento en combate.
- 15) Menájem Beguín (1913-1992), Primer ministro de Israel entre 1977 y 1983.
- 16) Fue una organización paramilitar que actuó entre los años 1931 a 1948, durante el mandato británico de Palestina. A posteriori de la Segundad Guerra Mundial, los británicos acusaron a dicha organización de cometer actos de terrorismo contra el gobierno británico establecido en Palestina. El “Irgún” fue el antecesor del partido político “Likud”, al que pertenecía Beguín.
- 17) El 16 de abril de 1947 en la prisión de Acre, junto a Gruner, fueron ahorcados ese mismo día, dos compañeros más. A Gruner se le acusaba de haber disparado contra un policía, de tener explosivos en su poder al momento de la detención y un intento de homicidio contra personal de su majestad británica.
- 18) Fundación Malvinas Argentinas: “Malvinas: historias ocultas de la guerra”, ediciones del Boulevard, Córdoba, Argentina, 2012, p. 104.
- 19) Ibidem, p.104.
- 20) El embajador del Reino Unido en Israel expuso ante Beguín, una serie de fotografías tomadas en Perú en las que se veía cómo, material de guerra era trasbordado de los aviones peruanos a los de Aerolíneas Argentinas, lo que ponía en evidencia la triangulación entre Israel, Perú y Argentina. “Beguín se encogió de hombros, negando saber nada del tema, seguramente pensando en qué diría Dov de la furia del británico”. citado en “Malvinas: Historias Ocultas de la Guerra”, p.104.
- 21) Leopoldo Fortunato Galtieri (1926-2003), fue presidente de facto de Argentina durante el conflicto por las Malvinas.
- 22) Los otros dos representantes fueron el secretario de Galtieri, General Héctor Iglesias y el contralmirante Roberto Nolla.
- 23) Víctor Andrés García Belaúnde, fue Secretario de la Presidencia del Perú durante el conflicto del Atlántico Sur. Actualmente es congresista de su país.
- 24) “El Perú en conflicto ajeno: así actuamos en la guerra de las Malvinas” http://elcomercio.pe/mundo/actualidad/peru-conflicto ajeno-nuestra-actuacion- guerra-malvinas-noticia-1395667
- 25) Basilio Lami Dozo, Brigadier General (R). Fue el comandante de la Fuerza Aérea durante la guerra de las Malvinas. la cita pertenece a: Dobry, h.: “Operación Israel: el rearme argentino durante la dictadura (1976- 1983)”, ediciones Lumiere S.A., Buenos Aires, Argentina, 2011, p. 53.
- 26) FAP: Fuerza Aérea Peruana.
- 27) Para un detalle más pormenorizado sobre la “Operación Exocet” y de la directiva “Celeste y Blanco”, puede verse: “El otro rol de Perú durante la guerra de Malvinas”: http://www.infobae.com/2012/04/01/640028-elotro- rol-peru-la-guerra-malvinas/
- 28) Alexander Haig (1924-2010). General del Ejército de ee.uu., Jefe de Gabinete (1973-1974), Comandante Supremo de la OTAN (1974-1979). Entre 1981 y 1982 fue Secretario de Estado. Su ambigua posición durante el conflicto de Malvinas, primero como mediador, y luego de fracasado dicho intento, como aliado de Gran Bretaña, dejan dudas acerca de las verdaderas intenciones de su país en la contienda.
- 29) Frank Ortíz.
- 30) Haig le hizo la advertencia a Belaúnde en el sentido que no tenía ninguna duda que, de suscitarse un enfrentamiento armado, los británicos vencerían, atento a su superioridad en armamentos y tecnología.
- 31) Yofre, Juan b.: “1982 – “Los documentos secretos de la guerra de Malvinas/ Falklands y el derrumbe del Proceso”, editorial Sudamericana, Buenos Aires, Argentina, 2011, p. 351.
- 32) Argentina rechazó la designación de Estados Unidos y propuso en su reemplazo a Canadá o Italia.
- 33) Nicanor Costa Méndez (1922-1992), canciller argentino durante la guerra de las Malvinas. Anteriormente ya había sido ministro de relaciones exteriores (1966), durante el gobierno de Juan Carlos Onganía.
- 34) Manuel Ulloa Elías (1922-1992). Fue además ministro de economía del Perú y Senador Nacional (1980-1985).
- 35) Yofre, op. cit., p. 353.
- 36) Moro, Rubén O.: “La guerra Inaudita- Historia del conflicto del Atlántico Sur”, editorial Pleamar, Buenos Aires, Argentina, 1985, p. 208. la cursiva es del original.
- 37) La nave argentina fue atacada a más de 30 millas marinas fuera de la zona de exclusión determinada unilateralmente por Gran Bretaña. Fue tan grave el impacto del hundimiento del Belgrano en la comunidad internacional, que el Reino Unido, a partir del día 7 de mayo amplió la zona de exclusión hasta las 12 millas, límite del mar territorial argentino, para evitar hechos similares.
- 38) Moro, op.cit.p. 210.
- 39) “Informe Rattenbach”, II Parte- Antecedentes del conflicto- capítulo V- las negociaciones a partir del día 02 de abril de 1982 (1)- la intervención del Perú. creado por resolución 15/82 del PEN, de fecha 2 de diciembre de 1982, se trataba de un cuerpo integrado por 7 militares en retiro, a cuya cabeza estaba el teniente general benjamín Rattenbach. Su objetivo era analizar y evaluar lo actuado por la conducción tanto política como militar, durante la guerra de las Malvinas.
- 40) “Informe…”, apartado 408, inc. e).
- 41) “Informe…”, apartado 412, inc. a).
- 42) Francis Pym (1922-2008), fue el canciller del Reino Unido durante la guerra de las Malvinas.
- 43) Viajaron en la misión a lima, el Secretario General de la Presidencia, Gral. Iglesias, junto con el Jefe de la casa militar, Contralmirante Moya. También concurrieron funcionarios de la embajada Argentina en Perú.
- 44) “Informe…”, apartado 413.
- 45) “Informe…”, apartado 415.
- 46) “Informe…”, apartado 417.
- 47) “Informe…”, aparatado 417.
- 48) Ibidem.
- 49) “Informe…”, apartado 421.
- 50) En la resolución I de la Vigésima reunión de consulta de ministros de relaciones exteriores de América, aprobada el 28 de abril de 1982, se resolvió urgir al gobierno del Reino Unido para que cesara de inmediato con las hostilidades en la región, asimismo se hacía un llamamiento a la Argentina para que se abstuviera de realizar acciones que pudieran agravar la situación, se instaba a los gobiernos de ambos países para que establecieran un cese al fuego, entre otras medidas. La resolución II, de fecha 29 de mayo de 1982, dejaba en claro que, con posterioridad a la adopción de la resolución I, “…el gobierno de los Estados Unidos de América decidió la aplicación de medidas coercitivas a la república Argentina, y presta su apoyo, inclusive material, al reino unido, lo que contraviene el espíritu y la letra de la resolución I”. Puede verse en: http://www.iri.edu.ar/publicaciones_ iri/IrI%20comPleto%20 %20Publicaciones-05/Publicaciones/ I2/I2-2W.htm
- 51) Abreviatura del “comité militar”. era un organismo compuesto por los integrantes de las tres Fuerzas Armadas, cuyo objetivo era hacer una evaluación diaria sobre el conflicto, tanto a nivel militar como diplomático.
- 52) Se le criticaba a la organización, el no haber sido más proactiva, sobre todo al momento de exigir la aplicación del TIAR.
- 53) El Secretario general del organismo regional americano en ese momento, era el argentino Alejandro Orfila.
- 54) El Preámbulo de dicho “Acuerdo Provisional” establecía que: “el gobierno de la República Argentina y el gobierno del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte, en adelante denominados “las Partes”, respondiendo a lo dispuesto en la resolución 502 (1982) del consejo de Seguridad de fecha 3 de abril de 1982 y teniendo en cuenta la carta de las Naciones unidas, las resoluciones 1514 (XV), 2065 (XX) y las demás resoluciones de la Asamblea General relativas a la cuestión de las Islas Malvinas (Falkland Islands), han aceptado, de conformidad con el artículo 40 de la carta de las Naciones unidas, la asistencia del Secretario general de la organización de las Naciones unidas y han llevado a cabo negociaciones y alcanzado el siguiente acuerdo provisional referente a las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur, de aquí en adelante denominadas “las Islas” a los efectos del presente acuerdo”.
- 55) “Informe…”, Anexo V/95.
- 56) “Informe…”, apartado 442.
- 57) Enrique Juan Ros, quien se desempeñaba como subsecretario en la cancillería de Argentina.
- 58) “Informe…”, apartado 464.
- 59) “Informe…”, apartado 465.
- 60) El documento es conocido como: “la propuesta británica del 17 de mayo”.
- 61) Informe, apartado 506.
- 62) Informe, Anexo V/135.
- 63) Esta resolución fue aprobada por unanimidad
- 64) La nave fue atacada fuera de la zona de exclusión establecida por Gran Bretaña.
- 65) Al menos esa era la creencia del gobierno de Galtieri.
- 66) Estas afirmaciones pertenecen al canciller Costa Méndez y fueron realizadas varios años después de la guerra. citado en Yofre, “1982” … p.355.
- 67) Moro, op, cit., p.210.
- 68) Estados Unidos, al comienzo de las hostilidades se mostró, exteriormente, como un país neutral, que buscaba de buena fe una solución pacífica al conflicto. luego, y como ya hemos visto, se volcaría definitivamente a favor de Gran Bretaña.
- 69) Cisnero, fue un comando argentino que murió combatiendo, cuando la guerra ya estaba terminando, en junio de 1982. Su apodo de “Perro” le venía por ser un cancerbero y una persona fiel a sus principios. Cuando el 2 de abril estalló la guerra, Cisnero donó el 50% de su magro sueldo al denominado “Fondo Patriótico” para las Malvinas.
- 70) http://embajadadelperu.int.ar/wp content/uploads/2012/02/documento- grupo-de-Apoyo-peruano-a-causa-malvinas.pdf
- 71) Entre los miembros firmantes del Acta fundacional figuran: el congresista Víctor Andrés García Belaúnde, el embajador Manuel Rodríguez Cuadros y los doctores Marcial Rubio Correa y Alberto Adrianzán. Luego, se han ido agregando otras personas, como Diego García Sayán y los expresidentes Víctor Paniagua y Alejandro Toledo.
- 72) La conferencia fue dictada el 28/10/16.
- 73) Fue el sábado 28 de julio de 1821 en la ciudad de Lima.
Y después le pagamos a Perú vendiendole armas a Ecuador durante el gobierno de Menem. Y por cierto el que está en la foto no es Nixon sino Reagan
Gracias Marcelo. Se edita
Interesantísimo articulo.
Me gustaría conocer las implicancias de El Vaticano en este asunto y si influyó (o tuvo intención de influir) en los acontecimientos.
Saludos al señor Diego García Montaño.
El articulo aqui expùesto como era de esperarse al ser de una fuente argentina cuenta solo la parte que le conviene, se omiten varios hechos a conveniencia que engañan a las masas para hacerles creer una cosa anticipada en vez de exponer sobre la mesa toda la informacion de conocimiento publico y que la gente saque solita sus propias con conclusiones.
1: Los britanicos tuvieron soberania en esas islas desde 1774, los españoles llegaron poco despues expulsando a los britanicos porque segun el tratado que la Corona Española tenia con Portugal cualquier cosa que hubiera en aquellas latitudes les pertenecia, cosa que para los britanicos no tenia validez porque ellos no tenian ningun acuerdo con la Corona Española, los españoles estuvieron poco tiempo alli hasta ser expulsados por los britanicos, a partir de ese momento la Corona española jamás reclamó las islas nuevamente, por lo tanto argumentar herencia española es tomarse de algo que no existe porque la propia Corona Española renunciò por abandono a esas islas antes de que siquiera en todo el continente americano hubiera un solo territorio independizado de sus respectivas Coronas; lo que pasó en 1833 es que los britanicos recuperaron definitivamente la soberania de las islas, y digo recuperaron porque fueron los que acumularon mas tiempo alli desde la llegada de Francia en 1773.
2: La Operacion Rosario bajo ninguna instancia fue de “baja intensidad”, fue una accion de alta intensidad si se compara con lo que habia en las islas, soldados britanicos no profesionales ni en edad ni en entrenamiento ni equipamiento armados con fusiles que una mañana por sorpresa ven cómo vehiculos AMTRAAC resistentes a disparos de cohetes llegaban a las costas, aquello fué visto por el mundo como un enorme despliegue de fuerzas argentinas, se omite que una de las primeras cosas que hizo Argentina fue tratar de imponer su moneda y a una relacion ridicula que dejaba a la moneda de las islas con valor de papel mojado, eso fue visto como un acto colonianista argentino a los habitantes de las islas que virtualmente los convertia en pobres según los criterios impuestos por Argentina hacia ellos.
3: La ayuda peruana se resume a diez aviones que nunca entraron en combate pues no estaban en condiciones de combate, error que muchos cometen es confundir condicion de vuelo a condicion de operativo, los diez aviones peruanos estaban solo en condicion de vuelo, no operativos para el combate, los tecnicos argentinos perdieron tiempo tratando hacer funcionar algo que llegó sin funcionar; la ayuda de Israel no fué toda hacia Argentina como se hace ver aquí, se omite que Argentina solicitó a Israel poco ante del conflicto equipamiento para guerra bactereologica frente a un posible agresor, y los israelies se la negaron porque sospechaban que mas bien era Argentina quien iba a ser el agresor.
4: El hundimiento del Belgrano solo causa polemica en medios hispanohablantes, en medios anglosajones es de conocimiento publico que el Belgrano tenia ordenes de ir a la ofensiva y atacar a la flota britanica sin provocacion de ésta, esas fueron las ordenes de Buenos Aires que fueron interceptadas por los britanicos, esta informacion se menciona tarde mal y nunca en medios hispanohablantes cuando tratan el tema y en cambio en medios anglosajones esto es una informacion de mención casi obligada.
Hay muchos errores o falta de rigor técnico/histórico en su comentario. El más claro es respecto a lo que comenta sobre la Naval Party 8901, unidad de los Royal Marines que se encontraba en Malvinas al momento de la recuperación por parte de las Fuerzas Argentinas.
Carlos Borda, en lo medular Daniela tiene razón, cuando en 1820 Argentina desembarcó en las islas lo hizo expulsando a los ingleses que llevaban décadas allí, en 1833 regresaron y las recuperaron, tal como lo hicieron en 1982, ellos jamás renunciarán a su soberania, porque ellos llevan siglos allí, lo demás es solo un cuento ultranacionista argentino y que lo único que ha logrado es aislar al país del resto del mundo.
Los que toman las deciciones son los de arriba, el ciudadano de a pie no es interlocutor valido para oponerse a ciertas acciones o decisiones, no habia forma alguna en que el ciudadano argentino se opusiera a la venta argentina de armas a Ecuador porque sencillamente se hizo de un dia para otro y sin consultarle a nadie, igualito que Galtieri y su Operacion Rosario, el ciudadano de a pie no puede hacer nada…
Y el pago a Perú fue vendiendo armas a Ecuador en el CENEPA 1995 ,así quien los quiere de amigos?
Aquí en EEUU, país donde vivo y en la cual también soy ciudadano desde hace mucho, muchas las decisiones militares de este país se hacen también sin pedirle al Pueblo o Congreso!
Reconozco las buenas intenciones que tuvo el gobierno Peruano en apoyar a Argentina en su posición en el conflicto, no hubo otro país que haya colaborado así en aquel momento.
De hecho la idea inicial de Argentina era obligar a Inglaterra a negociar la soberanía de las islas de la cuál se había negado siempre, a pesar de que Argentina ocupó las Malvinas sin producir bajas Británicas la intención del imperio siempre fué mantener el dominio a como de lugar. La guerra era inevitable y la estrategia Argentina había fallado.
Esta Srta. Daniela tendría que vivir en Gran Bretaña, si es que ya no lo hace, comodamente preparada con una libra estable pero devaluada con respecto al dólar para la falta de gas del próximo invierno boreal; el brexit que esta destruyendo ese maldito imperio en decadencia que sobrevivió a varias guerras gracias a la obsecuencia inexplicable de los norteamericanos (en caso contrario estaria hablando un alemán fluido desde 1917). Si por contrario es una ciudadana argentina debería recordar a todos los 649 héroes irredentos muertos en Malvinas. Daniela….volveremos y no quedara kelper en las Malvinas.
Por su antigüedad y velocidad la misión del Belgrano no era la de atacar a los modernos destructores de UK armados con misiles antibuque. Su misión era rematar con sus cañones de 152mm a unos 25 Km de distancia a los buques dañados por cazas o destructores Argentinos armados con Exocets.
los ingleses estuvieron en malvinas con permiso español y luego se retiraron reconociendo la soberania española, por lo tanto nunca fueron inglesas, no entiendo porque permiten comentarios de trolls pro ingleses y luego borran otros valiosos comentarios , con respecto a peru ,argentina recibio una gran colonia peruana hace decadas por lo que la “deuda” esta pagada hace rato, seria bueno dejar en claro que el pais que mas nos ayudo no fue latinoamericano sino árabe, fue Libia, con Gaddafi, seria bueno un articulo detallando la ayuda libia a argentina en la guerra de malvinas.
Al Sr. Luis Garbi: 👏🏻👏🏻🙏👍🇦🇷
Palabras acertadas Luis Garbi. La línea de tiempo de Daniela no convence a nadie. Por lo pronto este imperio británico decadente no va a soportar el “intercambio bélico” con Rusia, es una ventana de oportunidad que se le presenta a Argentina. A nosotros nos queda crecer como país, las instituciones, la democracia (difícil tarea no imposible) dignificar la vida del ciudadano.Soll así… si tenemos un país serio podemos recuperar las Malvinas.
Yo no lo festejo a Luis Garbi. En vez de responderle a “Daniela” con fechas concretas acerca de la historicidad de Malvinas cayó en el burdo de la pasión nuestra que todo lo echa a perder. Esto es un tema de soberanía, no un tema de camisetas de fútbol. Y baste recordar: cuando la victoria británica era inminente los argentinos ya la jugaban de desentendidos y negadores, concentrando su atención en el Mundial 82 de España. Yo, que seguí la batalla día a día, tuve el desagrado de presenciar ésto. Con el tema de los peruanos inmigrantes ahí ya volcó mostrando un nacionalismo rancio en vez del patriotismo debido.
Creo que no está mal que alguien de Gran Bretaña exponga el punto de vista histórico de ellos. Lo que me gustaría es que la tal “Daniela” se modere y no lo exponga como el punto de la verdad absoluta sino de lo que se conoce allá. Y me gustaría también que alguien de acá que conozca el tema histórico le responda de manera concreta, así aprendemos todos.
Señor Franco, no diga cosas que no son, los britanicos llegaron a esas islas en 1774, los españoles llegaron varios años después… ni los franceses ni los britanicos le tuvieron que “pedir permiso” a España, llegaron a esas islas como pedro por su casa y años despues los españoles llegaron alegando que las islas les pertenecian por el tratado que la Corona Española hizo con Portugal, pero ni los franceses ni los britanicos tenian ningun trato con España ni con Portugal asique para ellos ese tratado era papel mojado, una vez que los britanicos recuperaron las islas del control español la Corona Española nunca volvió a reclamar soberania sobre esas islas…
Daniela, usted tiene razón, solo que en la Argentina hay una obsecion por esas islas, obsecion que ha llevado a inventar una serie de mentiras, como la de que los ingleses las usurparon en 1833, la verdad es que ellos estaban desde mucho antes que Argentina desembarcará alli en 1820, en fin, la verdad duele y es dificil de aceptarla, y la mayoria no acepta que se diga la verdad, pero las islas son inglesas hace siglos y nunca van a renunciar a ellas, quizas en el futuro sea un pais independiente pero perteneciente a la comunidad británica de naciones.
Alguna persona me podría explicar en detalle la propuesta britanica presentada el 17 de mayo
Los Españoles llegaron a Malvinas en 1540 con Alonso de Camargo y estuvieron varios meses pero no encontraron oro ni plata, esto hubiera cambiado las cosas. En 1806 y 1807 el ejercito Español y las milicias Argentinas derrotaron a los ingleses en Buenos Aires. Y los reyes Borbones Españoles nunca tuvieron interés real en mantener unas islas lejanas sin oro ni plata, esa es la verdad.
Hay muchos hablando de la historia de Malvinas, nadie habla de como esa historia choca con el derecho geopolítico de la Argentina sobre las islas y éso tampoco se trató en la Asamblea de la ONU.
Si los 10 Mirage arribaron el 4 de junio a Tandil y sólo 10 días después se firma la capitulación, resulta complicado creer que en tan poco tiempo, incluso con aviones al 100%, la FAA tuviese ya listos y familiarizados un buen número de pilotos.
Franco, la recepción de ciudadanos del país xyz no implica que automáticamente se asuma una reciprocidad por cuentas saldadas. Perú no tiene una supuesta “deuda” con Venezuela y sin embargo está albergando a 1.5 millones de venezolanos. Son contextos diferentes.
O sea que la verdad existe si solo es aceptada por la versión Inglesa?
Argentina tuvo Gobernador Argentino y una niña llamada Malvinas nació dicha Isla de padres argentinos. Dicho Gobernador e Isleños fueron “Expulsados por la fuerza” a través de 2 barcos Norteamericanos y 1 Inglés!
Argentina señores ( y damas) no invento nada. Luego los Ingleses trajeron su propia gente y que esos descendientes de hoy son llamados “Nativos”.
Porque será que los Ingleses son llamados en todo el Mundo “ Piratas”?
Perú nos ayudó por una simple cuestión, después de MALVINAS seguían los chilenos. Chile nunca podría aguantar dos frentes. Así recuperaban los territorios perdidos en la guerra del Pacífico y terminar con los chilenos. Amistad con nosotros poca interés mucho. Y el verso de los Mirage regalados, ni ahí…no salieron caros.
Al belgrano lo mando a hundir Thatcher porque la noticia de que el conqueror lo tenía a vista de periscopio, le convenía hacerlo ya que si aceptaba la propuesta de Belaúnde Terry que le había llegado ese 2/5, se le terminaba la guerra y quedaba como una idiota…en lugar de eso, cambio las reglas de empeñamiento y se pasó por las bol..s que el buque estuviera fuera de la ZET, alegando x el contrario que era una amenaza para la flota
Un error en esa nota: Los Exocet que los peruanos fueron a comprar a Francia, no es que llegaron para cuando “finalizaba el conflicto” o algo así. Directamente no llegaron porque una de las directivas argentinas al agregado aeronáutico peruano en EE.UU. (quien era el encargado de realizar la operación en Francia), era que le probaran mediante la “valija técnica”, el correcto funcionamiento de los misiles. Cuando lo llevaron con los ojos vendados al depósito donde se encontraban esos doce misiles, pidió la comprobación de los mismos y los franceses le dijeron que no, que no había tiempo para hacer eso. Solo se limitaron a mostrarle el material embalado. Es por eso que ante la negativa argentina, solo se depositó una parte de los doce millones de dólares y el resto quedó impago. Luego de la guerra, si se completó la operación.
Otro error u omisión, es que los Mirage V P, vinieron con 25 misiles AS-30 R, que era la versión radio controlada de ese misil aire tierra francés. Luego, a principios de los 80, salió el AS-30 L (Láser), mucho más prestante. La gran contra que tenían esos misiles, era que debían ser lanzados a media o gran altura. No servían para bombardeo a baja cota.
La verdad, o al menos lo que dicen los libros de historia es que ya para 1502 se incluían en mapas españoles las Islas Mavinas divisadas por Américo Vespucio, luego pasó por allí la expedición de Magallanes, y el nombre de Malvinas se lo dieron los franceses (Malouines) que fueron los primeros en asentarse, lo que hicieron los británicos fue pasarse por el sobaco los tratados y las jurisdicciones y aplicar sus prácticas piratas apropiándose de algo que claramente pertenecía a la corona española, cosa que luego los españoles se encargaron de remediar echando a los ingleses del territorio perteneciente al virreinato del Río de La Plata y heredado por derecho a la Nación Argentina, en 1833 lo único que hicieron los ingleses fue tomar por la fuerza algo que la naciente Argentina no tenía medios para defender, no así lo que pasó durante las invasiones inglesas de 1806 y 1807 (un claro ejemplo de querer tomar lo que no les pertenece) y durante la batalla de la Vuelta de Obligado. Entiendo que el Sr Carlos Sobarzo es de nacionalidad chilena y de ahí sus opiniones desencontradas con el pensamiento argentino, como así también la señora Daniela que debido a sus comentarios debe de residir del otro lado de la Cordillera de los Andes…
El General Santiago Antonio María de Liniers era el Virrey del Virreinato del Río de la Plata, y mandaba a las fuerzas Españolas y milicias Argentinas que derrotaron a los ingleses en Buenos Aires en 1806 y 1807 que invadieron la ciudad con 12.000 soldados. El general William Beresford se rindió en la plaza Mayor, actual plaza de Mayo. Las banderas capturadas del 71 y 95 regimientos de infantería británicos y una de los Royal Marines se pueden ver en el convento de Santo Domingo.
Los 10 Mirage V que el Peru le proporciono a la FAA fueron adquiridos en 1981, e iban a ser entregados por partidas segun el cronograma que ya habia establecido el SEMAN FAP: la primera (compuesta por 3 aeronaves) estaba planificada para Agosto de 1982, la segunda (3 aeronaves mas) para Octubre de 1982 y la ultima partida (los 4 Mirage V restantes) para Diciembre del mismo año.
El conflicto del Atlantico Sur obligo a la Fuerza Aerea Argentina a pedirle al Peru con caracter de urgencia el envio de TODAS las aeronaves Mirage V en las condiciones que se encontraran. El SEMAN hizo un esfuerzo extraordinario por poner esas aeronaves de combate en estado operacional, pero se eximio de cualquier problema tecnico que ocurriera ya estando en manos de la FAA.
Agustín Saez, al fin un comentario con altura
La “ayuda peruana” en la guerra de las Malvinas, responde a una doctrina centenaria de recuperar los territorios de Arica y Tarapacá, perdidas en la guerra de Pacífico, en una contienda que absolutamente nada tenían que ver y aún así se metieron, y Dada la política de la cúpula militar argentina era: “1° primero los ingleses y después los chilenos”, solamente Perú quería aprovechar esto ya que nunca tuvieron el coraje de enfrentarse a Chile , ni siquiera estando en clara ventaja militar y con un país (Chile) totalmente embargado a través de la “enmienda Kennedy”, ese es el resumen de la famosa “ayuda peruana” que por lo demás, no fue para nada GRATIS
SALUDOS
Señor Javier, no saca nada con manipular los hechos ni las fechas a su conveniencia, La Coroña Española nunca tuvo soberania en esas islas hasta después de la ocupacion francesa de 1773, el tratado que España tenia con Portugal para los franceses y britanicos era papel mojado, porque sencillamente ninguno de los dos tenia algun tratado con España ni con Portugal, por eso en 1773 Francia llegó a ocupar las islas como pedro por su casa y los britanicos hicieron lo mismo al año inmediatamente siguiente, ninguno de los dos tuvo ni que consultarle la opinión a España, en esas islas no había bandera alguna ni nada que representara soberania española, ya cuando los franceses y britanicos llevaban varios años asentados ahí recién la Corona Española se acordó que tenia sobre el papel una islas y cuando los franceses y britanicos fueron expulsados de esas islas ahí recién los españoles comenzaron a tener soberanía mas que con un simple papel mojado por los motivos ya antes mencionados… Después de ser expulsados los españoles la Corona Española nunca mas reclamó soberania en esas islas, entre la expulsión de los españoles de esas islas y la declaración de independencia de Argentina hay como cuarenta años de diferencia asique sea mas serio con sus argumentos…
Geográficamente las Malvinas son Argentinas, solo hay que ver la distancia al.continente, a España, Francia e Inglaterra. Y vemos las buenas intenciones de UK, porqué invadieron Buenos Aires? Qué legalidad tenían?
Señor Javier, otra cosa que olvidé de mencionar es que usted cita a la ocupacion francesa como la que le dio el nombre a las islas, pero lo cierto es que esas islas ya tenian nombre bastante años antes de la ocupacion francesa, en 1690 el capitán Jonh Strong viajaba del Atlantico al Pacifico y una tormenta lo desvio de su curso, llegando a esas islas y bautizandolas como Falkland, por el primer Lord del almirantazgo Lord Falkland.
Estimada Daniela, yo no manipulo nada, solo reproduzco lo que cualquier libro de historia dice, lo más cercano a la manipulación es lo que usted plantea me parece…
Otra cosa Daniela, John Strong llamó Falkland al Estrecho de San Carlos, no a las islas pero no las ocupó, entonces, si hablamos de descubrimiento primero lo tenemos a Vespucio y luego a la expedición de Magallanes, muy anteriores a cualquier avistamiento británico, y si hablamos de ocupación Primero tenemos a los franceses que luego ceden y reconocen ante las protestas españolas el asentamiento y los territorios y estos son devueltos a la corona española, es historia, está en los libros, pasa que usted insiste en una versión inglesa casi sin sustento porque es obvio que simpatiza con los británicos y desea con todas sus fuerzas que lo que usted dice sea verdad.