Hace aproximadamente 30 años, emergían de las plantas de producción el primer ejemplar del tanque T-90 de la Federación Rusa. Si bien su desarrollo inició durante los últimos años de la Unión Soviética, el tanque fue incorporado en aquella primera década en las filas de las Fuerzas Terrestres de Rusia.
El T-90 surgió como la respuesta de la entonces Unión Soviética de los últimos tanques occidentales. Más precisamente, fue diseñado y fabricado para rivalizar con aquellas primeras versiones del M1 Abrams del Ejército de los Estados Unidos que comenzaban a ver la luz durante los años 80´. De esta forma, las plantas de producción basadas en los Urales tomaron a uno de los tanques soviéticos más exitosos (y aún en servicio), el T-72, como base para el desarrollo de un nuevo blindado en toda regla.
Una de las principales incorporaciones del T-90 en la fase de diseño fue la instalación de nuevos sistemas de protección. Más precisamente, el sistema o conjunto de protección activa electroóptica Shtora-1. Empleado para interrumpir los sistemas de guía laser de los misiles antitanques de la época.
A su vez, también incorporaba los sistemas de control de tiro automáticos e integrados 1A45T Irtysh, junto a los sistemas de visión para el comandante de tanque PNK-4S. Esto permitía a los primeros T-90 poder disparar su cañón de 125mm y ametralladoras RCWS en tiro estacionario como en movimiento, tanto de día como de noche. Además, el cañón de anima lisa del T-90 podía emplear los novedosos sistemas de misiles guiados antitanque 9K119 Refleks, incrementado el rango de disparo del tanque en 5 kilómetros adicionales al emplearlos.
Sin embargo, la historia del T-90 debió sortear la implosión de la Unión Soviética y separación de sus repúblicas en nuevos estados independientes. Este hecho de trascendencia histórica y geopolítica llegó cuando el tanque estaba por entrar en producción en masa demorando su introducción a finales de los años 90´con las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa.
Si bien las Fuerzas Terrestres Rusas presentaron órdenes para la adquisición de los nuevos T-90, esta no fueron las proyectadas originalmente durante la época de la Unión Soviética. La crisis economía en la cual estaba inmersa Rusia durante esos años tuvo su impacto en el presupuesto de defensa de la nueva república independiente. La alternativa para el T-90 fue entonces fue el mercado de exportación para así aprovechar las capacidades instaladas de la planta de Uralvagonzavod. Este proceso de promoción se sintetizo en la versión T-90S.
De esta forma, la República de la India centró en su atención en esos años en la adquisición de un nuevo tanque de batalla. Con esto presente, las autoridades rusas presentaron su propuesta basada en el T-90. En total, tres unidades fueron enviadas a la India en el año 1999, conociendo con el fallecimiento de su principal diseñador e impulsor: el Jefe de Diseño Vladimir Potkin.
Evaluado por los altos mando del Ejército de la India, el T-90 debía afrontar cambios y mejoras para hacer frente a las particularidades de la geografía del país. Uno de ellos fue el cambio del motor original por uno más potente. Con las modificaciones realizadas, la India adquirió un primero lote de 310 T-90S, denominados como Bhishma, en el año 2001. Este lote fue seguido por otro de 330 que fueron manufacturados localmente por la empresa Heavy Vehicles Factory.
Este primer contrato de venta de los T-90 permitió que otros países también adquirieran al tanque a lo largo de la década de los 2000’. Más precisamente, Azerbaiyán, Argelia, Turkmenia, Uganda, Vietnam y Irak. A su vez, la Federación Rusa tomó como base la versión de exportación T-90S para el desarrollo de un nuevo tanque: el T-90A.
Denominado como “Vladimir”, en honor a su diseñador e impulsor, el T-90A comenzó a ser incorporado en el año 2005. Entre sus mejoras se hallaron un nuevo motor V-92S2 y visores termales ESSA. Este a su vez, dio paso a la más moderna versión encontrada al día de la fecha, y de reciente incorporación de a las Fuerzas Terrestres Rusas: el T-90M ‘Proryv-3’, comenzando a ser entregado en el año 2020.
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