De acuerdo con algunos trascendidos, el Ministerio de Defensa japonés anunció la intención de desarrollar misiles tierra-aire con el objetivo de mejorar las capacidades de derribar misiles crucero y drones. Según medios internacionales, el nuevo sistema tierra-aire de corto alcance será producido y destinado a las Fuerzas Terrestres de Autodefensa de Japón. Se espera que el sistema incremente las capacidades del actual Tipo 91 SAM (Surface-to-air misiles).
En la actualidad, las Fuerzas de Autodefensa japonesas poseen misiles Tipo 91 Kin-SAM, un sistema de defensa aérea portátil japonés (MANPADS) de corto alcance que fue desarrollado para reemplazar a los FIM-92 Stinger estadounidenses. A diferencia de estos últimos, el sistema Tipo 91 posee un diseño diferente y una mejora en su sistema de guiado. El Tipo 91 Kin-SAM se puede utilizar contra aeronaves de combate y helicópteros. El alcance máximo es de 5 km y el alcance mínimo es de 0,3 km. La altitud máxima de detección es de unos 3,5 km en condiciones óptimas.
Por otro lado, en 2007 el las Fuerzas de Autodefensa presentaron el sistema Tipo 91 Kin-SAM Kai, una versión mejorada del Tipo 91 Kin-SAM. Esta nueva adaptación presentó un misil actualizado con una guía infrarroja e imágenes mejoradas, junto con capacidades de combate nocturno y un rendimiento a baja altitud.
A diferencia del sistema Tipo 91 Kin-SAM, se espera que la nueva incorporación tenga la capacidad de interceptar drones de porte medio y misiles crucero. De acuerdo con lo revelado, la intención del gobierno nipón es que la producción se complete para el año 2026, y sea incorporado en las filas para el 2029.
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