China concreta la venta de entrenadores L-15 a Emiratos Árabes Unidos

Teniendo como marco la Exposición y Conferencia Internacional de Defensa (IDEX 2023) en la ciudad de Abu Dabi, la República Popular China ha concretado un hito histórico para su industria de defensa, al confirmar la venta de entrenadores avanzados Hongdu L-15 Falcon a Emiratos Árabes Unidos.

El anuncio fue realizado por la China National Aero-Technology Import & Export Corporation (CATIC), luego de cerrar los respectivos acuerdos con el Ministerio de Defensa de Emiratos Árabes Unidos. Si bien las gestiones datan de hace por lo menos un año atrás, cuando autoridades del país informaron su interés por los entregadores chinos, no se ha indicado el número final de unidades a adquirir. Las intenciones originales de la Fuerza Aérea de EAU se basarían en la incorporación de un lote inicial de doce (12), con opciones de elevar dicha cifra hasta las treinta y seis (36) aeronaves.

Denominado como JL-10 por la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (PLAAF), el Hongdu L-15 Falcon es el principal entregador avanzado de pilotos chinos. El paso previo de su formación y conversión para situarse a los mandos de aeronaves caza más complejas, como es el caso de los J-11, J-16, y el caza de quinta generación J-20.

En lo referido a su desarrollo, este surge como un requerimiento de la PLAAF para modernizar las capacidades de formación y entrenamiento de sus futuros pilotos. Estos llevaron a la necesaria asociación con empresas del extranjero, entre las cuales se encontró la rusa Yakovlev. Con estos antecedentes, el Hongdu L-15 Falcon comparte similitudes con el Yak-130 empleado por la Fuerzas Aeroespaciales de la Federación Rusa. Su primer vuelo tuvo lugar en el año 2006, entrando en servicio activo en el año 2008. Actualmente está equipado con un motor ruso Ivchenko-Progress AI-222, en dos versiones: L-15AJT (Advanced Jet Trainer) y L-15AFT (Attack Fighter Trainer).

La confirmación de la compra de los nuevos entregadores de origen chino por parte de Emiratos Árabes Unidos marca el nivel de alejamiento con los Estados Unidos. Históricamente el país ha sido (y aún lo es) un importante cliente de sistemas de armas de fabricación occidental. No obstante, uno de los puntos de quiebre en la relación entre ambos gobiernos puede verse en la negativa y falta de repuesta norteamericana frente al pedido para iniciar gestiones para la compra de cazas F-35.

El pedido elevado por el gobierno de EUA también incluía diversos tipos de vehículos aéreos no tripulados, como es el caso de MQ-9B Sky/Sea Guardian. Sin embargo, la administración del presidente Biden puso entre los reparos y exigencias que el país del Golfo Pérsico retire a compañías chinas de la instalación de las nuevas redes de telecomunicaciones 5G, además de un alejamiento diplomático con el gigante asiático. Estas cuestiones fueron vistas como una intrusión en los asuntos internos del gobierno y Estado de Emiratos Árabes Unidos, provocando un quiebre en la relación.

Con esto presente, desde los últimos años la República Popular China viene intentado ocupar dicho vacío a través de importantes inversiones en diversos rubros. El militar y la industria de defensa asociada no es una excepción. Por último, y con la IDEX 2023 de fondo, el gobierno chino y empresas asociadas buscan que la concreción de la venta de los entrenadores L-15 sea el puntapié inicial de una fructífera relación entre ambos países. La cual podría incrementarse con la venta de sistemas de armas más complejos, como aeronaves de transporte estratégico Y-20 y opciones de desarrollo conjunto del futuro caza naval FC-31. Los cuales han estado presentes en los stands de exposición en la feria internacional.

Por último, en lo referido al proceso de incorporación de los L-15 a la Fuerza Aérea de Emiratos Árabes Unidos, no fueron divulgadas las fechas y cronogramas de entregas de los entrenadores, como el monto total de la operación.

*Fotografía de portada: Xu Zheng – Airliners.

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