A través de una ceremonia oficial, teniendo como marco al astillero Nagasaki, Mitsubishi Heavy Industries Maritime Systems Co., Ltd. y la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón (JMSDF) conmemoraron la entrada en servicio de la cuarta fragata de la clase Mogami (también denominadas como 30FFM, 30FF, 30DX o 30DEX).
El buque nombrado como Mikuma (FFM-4), es una fragata multipropósito de nueva generación diseñada para la JMSDF. La misma tiene un desplazamiento de unas 5.500 toneladas, con una eslora de 132,5 metros, una manga de 16,3 metros, y una velocidad máxima que supera los 30 nudos. En lo referido a su armamento principal cuentan con un cañón 127mm MK-45, complementado con la capacidad de lanzamiento de misiles antisuperficie Tipo 17; contando con lanzadores de misiles verticales MK-41 que empleando misiles Tipo 03, sumado a un sistema SeaRam.
Esta fragatas de fabricación japonesas puede desplegarse para diversas misiones, como alerta y vigilancia, guerra antiaérea, antisuperficie, antisubmarina y operaciones de rastreo de minas. Sin embargo, la nueva clase está destinada a “impulsar las misiones de recopilación de información y vigilancia en tiempos de paz en medio de un aumento del volumen de actividades en torno a Japón”, declaró Kosuke Takahashi, experto en defensa en Tokio.
“En caso de emergencia, la Marina pueden recurrir a estas nuevas fragatas en un breve periodo de tiempo y coordinarse con las unidades de misiles de la Fuerza de Autodefensa Terrestre desplegadas en las islas Nansei del suroeste para mantener a raya a las fuerzas chinas, al tiempo que ganan tiempo para que el ejército estadounidense apoye a las fuerzas japonesas“, declaró Takahashi.
Estas avanzadas fragatas, forman parte del empeño de Tokio por mantenerse a la altura de las más avanzadas capacidades militares de los países vecinos en medio de lo que, según el gobierno japonés, es un “entorno de seguridad cada vez más severo.” En ese sentido, la Armada del Ejército Popular de Liberación (PLAN) está ampliando rápidamente el tamaño de su flota y sus capacidades militares, mientras que Japón está tratando de garantizar que las Fuerzas de Autodefensa sigan el ritmo lo mejor posible sin dejar de ser un socio capaz de operar en situaciones complejas con la Marina de los Estados Unidos (US Navy), dijo Bradford, especialista en seguridad marítima.
Vale recordar que Japón ha planeado duplicar el presupuesto destinado al área de defensa desde el año 2022, habiendo logrado un importante avance en la presentación de una serie de documentos oficiales, entre los cuales se destaca la nueva Estrategia Nacional de Defensa.
*Fotografías: Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón (JMSDF).
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