La Real Fuerza Aérea Británica marcó un hito al recibir su vigésimo segundo avión de transporte Atlas C1 (A400M), completando de esta manera la fase de desarrollo y producción. El cuatrimotor turbohélice producido por Airbus arribó a la base aérea RAF Brize Norton procedente de Sevilla, marcando un cierre en las incorporaciones de esta aeronave, por lo menos hasta que se formalice un nuevo pedido.
Con la decisión del retiro prematuro de su flota de C-130J Hércules, el gobierno británico ha puesto una carga considerable sobre la flota de Atlas C1 de la RAF, fuerza que espera poder incorporar al menos 6 aeronaves adicionales para el fin de la década. Sin embargo, diversos analistas y funcionarios han señalado que en el ínterin, la RAF se desprenderá de algunas capacidades de transporte, pasando a depender exclusivamente de una aeronave que aún sigue requiriendo diversas soluciones a novedades recurrentes.
La importancia de la movilidad táctica aérea quedó demostrada recientemente con los acontecimientos acontecidos en Sudán. En el caso de los Atlas, las aeronaves operaron desde aeródromos austeros y asistieron en la evacuación de más de 2.200 personas, junto a los C-17 Globemaster III y C-130J Hercules.
De acuerdo con lo informado por la RAF, el desarrollo de la plataforma continuará con aviones que pasarán por un programa de retroadaptación para alcanzar una configuración operativa con importantes puntos en común con la de los demás operadores del A400M: Francia, Alemania, España, Turquía y Malasia. Paralelamente, su capacidad táctica seguirá ampliándose, incluyendo toda la gama de apoyo a las fuerzas aerotransportadas del Reino Unido. Esto último posiblemente incluya mejoras en algunos Atlas de la flota para brindar apoyo a operaciones especiales.
Desde que entraron en servicio en la RAF en 2014, los Atlas han demostrado sus capacidades en distintas operaciones a lo largo y ancho del globo: desde asistencia humanitaria en el Caribe, pasando por la evacuación de personal que se encontraba en Afganistán y Sudán. Su presencia no resulta desconocida por estas latitudes, ya que la RAF mantiene una aeronave desplegada en las Islas Malvinas, como parte de su fuerza de ocupación. Desde la base de Monte Agradable, el Atlas C1 no solo brinda apoyo en operaciones en torno a las islas, sino que también participa de misiones de abastecimiento aéreo en la Antártida.
Imagen de portada: RAF
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