Este lunes 14 de agosto, dos cazas F-16 Fighting Falcon de la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos interceptaron a dos bombarderos rusos que habían sido detectados previamente por sistemas de radar y vigilancia de Dinamarca, aeronaves que se encontraban en un trayectoria de aproximación al espacio aéreo del país. Alertados por los sensores de países aliados, los aviones de combate neerlandeses despegaron desde la Base Aérea Volkel en una misión de Alerta de Reacción Rápida (QRA). Así se reportó en uno de sus más recientes comunicados el Ministerio de Defensa de los Países Bajos.
En primer lugar, esta clase alerta no son tan usuales, pero los F-16 de la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos están en espera las 24 horas del día y despegan en cuestión de minutos para la intercepción de aviones no identificados que se aproximan a espacio aéreo soberano. En segundo lugar, también se debe destacar la interoperabilidad de las fuerzas entre los países vecinos, ya que fue Dinamarca quien dio el aviso al detectar la presencia de los bombarderos rusos.
Hasta el 31 de diciembre de 2016, la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos solo custodiaban el espacio aéreo neerlandés. Desde el 1 de enero de 2017, junto a Bélgica, han estado monitoreando y vigilando alternativamente el espacio aéreo de Bélgica, los Países Bajos y Luxemburgo. Estos tres países conforman el “Benelux“, un acuerdo de cooperación intergubernamental donde cada uno asume estas tareas alternándose durante varios meses. Esto incluye el despliegue de aviones de combate que brindan protección a los países del Benelux de los aeronaves civiles y militares que pueden representan una amenaza al acercarse sin identificación ni plan de vuelo.
Prosiguiendo lo informado por la cartera de defensa, el llamado QRA tuvo lugar a las 7:19 AM, cuando se produjo la detección de las aeronaves sin identificación, generando el despliegue de los F-16, los cuales fueron guiados hacia las coordenadas de contacto por el Estación de Control de Operaciones Aéreas en Nieuw Milligen; el cual está en estrecha vinculación con el Centro de Operaciones Aéreas Combinadas en Uedem de la OTAN.
Una vez arribado al punto de encuentro, los F-16 confirmaron la presencia de dos bombarderos rusos Tupolev Tu-95, sin especificar que versión de la aeronave de las Fuerzas Armadas rusas se trataba, iniciando lo protocolos de intercepción estipulados. Una vez realizadas estas acciones, los aviones rusos cambiaron su curso para retornar, presumiblemente a sus bases de asiento.
*Fotografía de portada empleada a modo de ilustración – créditos: Ministerio de Defensa de los Países Bajos.
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