El gigante aeroespacial Boeing anunció que estará a cargo del desarrollo de un prototipo y tecnologías asociadas correspondientes al programa Glide Breaker, iniciativa de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa de los EE.UU. (DARPA) que tiene como objetivo materializar un interceptor hipersónico.
Los primeros pasos de Glide Breaker se dieron en el 2018 con la intención de desarrollar y demostrar tecnologías que permitan la defensa contra sistemas hipersónicos, los cuales ya comenzaban a manifestarse como una amenaza atento sus capacidades para atacar objetivos a grandes distancias y a altas velocidades. El programa está a cargo de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA), la cual suele trabajar en asociación con las diversas compañías aeroespaciales de los EE.UU.
El programa Glide Breaker tiene por objeto informar el diseño y desarrollo de futuros interceptores hipersónicos, con los cuales se espera poder anular una amenaza que viaje a una velocidad al menos cinco veces superior a la del sonido en la atmósfera superior, durante lo que se conoce como la “fase de planeo” del vuelo. “…El desarrollo y los ensayos dirigidos por Boeing sentarán las bases para futuros interceptores de fase de planeo operativos capaces de defenderse de estas sofisticadas y cambiantes amenazas hipersónicas…”
De acuerdo con lo informado por Boeing, la compañía desarrollará y probará tecnologías a los fines de materializar un prototipo de interceptor hipersónico para Glide Breaker. “…Boeing realizará análisis de dinámica de fluidos computacional, pruebas en túnel de viento y evaluación de los efectos de la interacción aerodinámica del chorro durante las pruebas de vuelo…” detalló Boeing en su gacetilla de prensa.
“Los vehículos hipersónicos se encuentran entre las amenazas más peligrosas y de más rápida evolución a las que se enfrenta la seguridad nacional”, declaró Gil Griffin, director ejecutivo de Boeing Phantom Works Advanced Weapons. “Nos estamos centrando en la comprensión tecnológica necesaria para seguir desarrollando las capacidades contrahipersónicas de nuestra nación y defendernos de futuras amenazas”.
“Esta fase del programa Glide Breaker determinará cómo factores como el flujo de aire hipersónico y el disparo de propulsores a reacción para guiar el vehículo afectan al rendimiento del sistema a velocidad y altitud extremas en un entorno digital representativo”, declaró Griffin. “Estamos operando en la vanguardia de lo que es posible en términos de interceptar un objeto extremadamente rápido en un entorno increíblemente dinámico”.
EE.UU. ha reconocido que, tanto China como Rusia llevan la delantera en el desarrollo de la tecnología de misiles hipersónicos, mientras que los programas propios han sufrido diversas demoras por cuestiones técnicas. Planificadores militares también han tomado nota de esta creciente amenaza, sobre todo en el área de operaciones del Indo-Pacífico, espacio donde EE.UU. y sus aliados se encuentran en constante puja con China. Este último país ya cuenta con algunos sistemas operativos, lo cual ha puesto en demanda el desarrollo de sistemas de contramedidas, entre ellos el interceptor previsto por el programa Glide Breaker.
Imagen de portada: DARPA
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