Luego de que hace algunos días trascendiera el derribo de un cazabombardero ruso Su-35S por fuego amigo en las inmediaciones de la ciudad de Tokmak, finalmente se viralizó una imagen de los restos de la aeronave, hecho que pone en evidencia una vez más los desafíos que enfrentan ambos bandos para operar en los cielos ucranianos.
Pese a que el derribo del Su-35S no había sido confirmado por Rusia o Ucrania, diversas cuentas de redes sociales se hicieron eco del incidente luego de que salieran a la luz algunos videos. La cuenta Fighterbomber de Telegram, conocida por mantener contacto estrecho con las Fuerzas Aeroespaciales Rusas, publicó un mensaje de condolencias acompañado con una imagen de un Flanker-E.
Con el transcurso de las horas, el derribo del Su-35S durante la madrugada del 29 de septiembre contó con material adicional para respaldar la supuesta pérdida, gracias a la viralización de una imagen donde se aprecian los restos calcinados del cazabombardero ruso. La foto parece ser una captura de video, el cual fue obtenidao con un drone.
Con la contraofensiva ucraniana aún en pleno desarrollo, Tokmak se ha convertido en uno de los próximos objetivos de las Fuerzas Armadas de Ucrania luego de meses de combates. Por esta razón, Rusia ha tomado los recaudos para continuar con las fortificaciones en torno al poblado, sumado a la utilización de su aviación de combate para ralentizar lo máximo posible el avance ucraniano.
Operando en un ambiente saturado de sistemas de defensa antiaérea, vehículos aéreos no tripulados, misiles crucero y todo tipo de aeronaves de ataque, la versión de fuego amigo no resulta para nada ilógica. Sobre todo por el desgaste impuesto por Ucrania en las últimas semanas, realizando ataques de precisión contra la profundidad del dispositivo ruso, obligando a las defensas rusas a mantener un constante estado de alerta.
Pese a que Ucrania cuenta con sistemas de defensa con el alcance suficiente para derribar un Su-35S operando sobre Tokmak, lo cierto es resultaría llamativo que se desplace unos de estos valiosos medios hasta una zona tan próxima al frente, particularmente por la amenaza que representan las municiones merodeadoras del tipo Lancet. Esta últimas han tenido notable éxito en misiones de supresión y destrucción de defensas antiaérea, tanto contra material soviético como occidental.
Vale recordar que en los más de 500 días de combate, ambos bandos ya han sufrido varias pérdidas de aeronaves por la acción de fuego amigo, incidentes que por supuesto no son exclusivo de este conflicto. Pese a que se pueden tomar los medidas necesarias para evitar este tipo de incidentes, la naturaleza misma de las operaciones de alta intensidad que se están viendo en Ucrania probablemente derivarán en situaciones similares.
Collage de portada ilustrativo. Foto principal: UAC
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