Por 15 días las Fuerzas Armadas de Paraguay realizaron el operativo Basalto II en la línea fronteriza con el Brasil cubriendo los departamentos de Concepción, Amambay, San Pedro, Canindeyú y Alto Paraná, recorriendo largas zonas boscosas para la localización y reducción del crimen organizado.
Este operativo se realizó en conjunto con las Fuerzas Militares de Brasil en lo que se conoció del lado brasileño como operativo “Ágata Oeste – Guaicurús IV”, para cubrir así la línea fronteriza. En Basalto II participaron el Ministerio de Defensa Nacional, el Ministerio del Interior, el Comando de Fuerzas Militares, unidades operacionales del Ejército, Armada y Fuerza Aérea; la Dirección de Material Bélico, la Policía Nacional, el Ministerio Público, Secretaría Nacional Antidrogas, la Coordinación Administrativa de Investigación Aduanera y la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios.
Se desplegó durante el operativo un personal de 1.100 hombres de las Fuerzas Armadas, 600 hombres de la Policía Nacional, 50 agentes de la Secretaría Antidrogas, aeronaves Tucano de la Fuerza Aérea y Helicópteros de la Armada, 140 vehículos terrestres entre ellos los Typhoon del Ejército y 14 lanchas patrulleras de la Armada.
En cuanto a resultados, el teniente coronel Luis Apesteguía, vocero de las Fuerzas de Tareas Conjuntas del Ejército en el norte de Paraguay, comentó a Zona Militar los resultados de Basalto II sobre el golpe al crimen organizado. “Se lograron sacar de circulación 279.720 kilos de marihuana, con a destrucción de 81 hectáreas de cultivo ilegal de la droga que estaban distribuidos en 48 campamentos, en lo que rondaría los 8.391.600 millones de dólares en perjuicio para estas organizaciones delictivas que se encuentran en la frontera”, expresó el teniente coronel Apesteguía.
Tras Basalto II, se mantuvieron fijos 50 puestos de control fronterizo, además prosiguen los controles aéreos a los campamentos ilegales de cultivos de marihuana y otras drogas, como los patrullajes en los ríos Apa y Paraná, que dividen Brasil y Paraguay.
No solamente las acciones de las fuerzas militares fueron de acción directa contra las organizaciones delictivas, sino que además se generaron acciones de ayuda social a la población civil.
“Lo más importante es el intercambio que tuvimos en cuanto a inteligencia con nuestros pares de Brasil, en una zona que es muy compleja por ser boscosa y de poco acceso, donde muchos grupos delictivos desarrollan sus ilícitos. Esta es una operación que duró 15 días y se espera que haya más acciones de este tipo”, aseguró Apesteguía.
*Fotografías: Fuerzas de Tareas Conjuntas del Ejército Paraguayo.
Tal vez te interese La Fuerza Aérea Argentina despliega al Boeing 737 T-99 para apoyar la repatriación de ciudadanos argentinos de Israel
