A través de un anuncio oficial, las Fuerzas Terrestres rusas han comenzado el proceso de recepción de los primeros lotes de nuevos obuses autopropulsados 2S43 Malva. La novedad fue brindada por el consorcio estatal Rostec en la jornada de ayer, 26 de octubre, con la entrega de la primera serie de sistemas de artillería al Ministerio de Defensa de la Federación Rusa para su provisión a unidades militares.

Con un peso de 32 toneladas, denominado oficialmente como 2S43 Malva, el sistema está basado en un cañón de artillería de 152 mm montado en un camión 8×8 de la empresa BAZ. Emulando de esta manera a otros diseños apreciados en Europa y otras regiones, como el caso de los CAESAR de origen francés, al igual que el ATMOS de la firma israelí Elbit Systems. Con este desarrollo del Centro de Investigación Burevestnik, una división dentro de la empresa Uralvagonzavod, las Fuerzas Terrestres rusas apuntarían a reemplazar a mediano plazo a sus antiguos obuses autopropulsados basados en plataformas de orugas que datan de los tiempos de la Unión Soviética, los cuales han sido superados en cuanto a diseño y funcionalidades. Más precisamente, se trata de los modelos 2A65 MSTA-B y el 2S1 Gvozdika de 122 mm.

Una de las últimas novedades que se tuvo durante el corriente año 2023 fue que el Malva había completado con éxito las denominadas pruebas estales a principios del mes de agosto, abriendo de esta forma el camino para la provisión de los primeros sistemas a unidades de artillería de las Fuerzas Terrestres rusas.

Al respecto, desde Rostec destacaron, en alusión a las capacidades del nuevo 2S43 Malva, que: “Gracias al chasis de ruedas, el ‘Malva’ puede desplegarse rápidamente en posición y retirarse de ella, evadiendo el fuego enemigo, lo que es crucial en condiciones de guerra de contrabatería. Esta es un arma moderna y poderosa que puede destruir prácticamente cualquier objetivo con municiones de fragmentación y alto explosivo a distancias de más de 24 km. La cadencia de tiro del obús es de más de 7 disparos por minuto, y su munición puede contener hasta 30 proyectiles“, señaló Bekhan Ozdoev, director industrial del complejo de armas convencionales, municiones y productos químicos especiales de Rostec.

Añadiendo: “El sistema de artillería autopropulsada “Malva” está diseñado para atacar puestos de mando, estructuras defensivas, baterías de artillería, cohetes y morteros, sistemas de defensa aérea, columnas de vehículos blindados y fuerzas enemigas”.

Sin embargo, como suele suceder con esta clase de anuncios, ni desde Rostec, ni el Ministerio de Defensa ruso, han confirmado el número de sistemas de artillería entregados a las Fuerzas Terrestres. Ni también si será sometido a más pruebas operacionales en los venideros meses, al igual si desde las autoridades militares planean su despliegue en los campos de batalla ucranianos.

*Fotografías empleadas a modo de ilustración.

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