La semana pasada los cazas Rafale, pertenecientes al escuadrón “Lorraine” 3/30, junto aviones de alerta temprana E-3F del Ejército del Aire y del Espacio de Francia pusieron fin a la primera fase del Ejercicio Atlantic Trident 23, habiendo completado numerosas misiones operando desde la base aérea de Waddington de la RAF en el Reino Unido.
Esta fase del Ejercicio AT 23 tuvo como epicentro a la Base Aérea de Waddington, ubicada en el Noroeste del Reino Unido, listándose la participación de cazas Eurofighter Typhoon y F-35B de la Royal Air Force (RAF) y F-15E y F-35A de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF). En total, los Rafale franceses realizaron 23 despegues aéreos acumulando 45 horas de vuelo, donde los pilotos del Ejército del Aire y Espacio de Francia realizaron una serie de Operaciones Aéreas Compuestas (COMAO) con múltiples objetivos, ya que el objetivo del Atlantic Trident 23 consiste primordialmente en fomentar la capacidad de acción y reacción frente a la amenaza de enemigos en un contexto bélico de alta intensidad que tenga a Europa como Teatro de Operaciones. Asimismo, de estas operaciones formaron parte los aviones de alerta temprana y control aerotransportado Boeing E-3F.
El despliegue de los Rafale del Ejército del Aire y Espacio Francés
El jueves 2 de noviembre, dentro del escenario ideado por en la denominada “Operación White Celle“, dio comienzo al Ejercicio AT 23. El comandante francés Romain anunció a horas del mediodía que: “Dos militares franceses han desaparecido. Por favor, comprueben la presencia de su personal y apliquen medidas de vigilancia en el exterior de la base aérea de Waddington”. Y luego le pidió a sus efectivos que llevaran a todo el personal desplegado para el AT 23 a la base de la Royal Air Force, permaneciendo en el recinto militar hasta que se aclare la situación. Luego de un par de horas, los militares fueron encontrados pero, sin embargo, los aviadores franceses recibieron instrucciones de mantener su presencia en la base.
Al día siguiente, continuó el ejercicio y como parte del escenario, las bases aéreas de la RAF Coningsby y Lakenheath fueron atacadas por la mañana. Se indicó que existía la posibilidad de que ocurra lo mismo con la base aérea de Waddington. Consiguientemente, todo el personal del destacamento francés tuvo que evacuar el lugar y en consecuencia, los cazas Rafale despegaron con la orden de aterrizar en la base aérea de Leeming. Los cazas polivalentes de cuarta y quinta generación de las fuerzas aéreas del Francia, Estados Unidos y Reino Unido llegaron a la base después de realizar un recorrido de 180 kilómetros.
Objetivos de los Rafale en el Atlantic Trident 23
El objetivo del escenario puesto durante esta primera fase fue que las fuerzas aéreas de Estados Unidos, Reino Unido y Francia muestren la capacidad de desplegarse rápidamente con todos los elementos necesarios para poner en acción a los aviones caza Rafale, Eurofighter, F-35A y F-35B con total autonomía y agilidad. En este sentido, para el Ejército del Aire y Espacio francés, se trata de una oportunidad para probar el concepto operativo de aplicación reactiva del arma aérea (MORANE), del mismo modo que ocurre para la Fuerza Aérea EE.UU. conocido como ACE (Agil Combat Employment), teniendo en cuenta sobre todo el contexto internacional europeo que se está teniendo lugar con la invasión de Rusia a Ucrania.
Siguiendo con este objetivo y haciendo hincapié en contrarrestar los efectos producidos por una guerra de alta intensidad, la realidad es que la proyección de las COMAO es de suma importancia. Al respecto, el Teniente Coronel Guillaume (jefe del destacamento francés) manifestó: “Un COMAO es un grupo de aeronaves de diferentes tipos, generalmente con una misión establecida de ataques y objetivos. Se trata de cazas, a veces integrados con aviones de apoyo como los reabastecedores de combustible y los aviones de mando y control (E3-F Awacs)”.
Con lo cual dado que el ejercicio Atlantic Trident 2023, se centra en avanzar en términos de interoperabilidad e integración entre los aviones de combate de cuarta y quinta generación de Francia, Estados Unidos y Reino Unido. Es de suma importancia que los Rafale continúen con sus misiones en el AT 23 de modo tal que su participación en la región contribuya a continuar mejorando y aumentando la superioridad aérea del escenario europeo de operaciones.
Por último, cabe destacar que durante los días sábado 4 y domingo 5 de noviembre se instalaron los equipos de mantenimiento como así también los sistemas de información y comunicación necesarios para la realización de las misiones programadas para la presente semana. Siguiendo con esta línea, el pasado lunes, las tripulaciones británica, estadounidense y francesa volaron desde la base aérea de Leeming para continuar con las tareas correspondientes al ejercicio Atlantic Trident 23.
*Fotografías: Ejército del Aire y Espacio francés.
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