Las crecientes tensiones en la región Asia-Pacífico, con la eventualidad de un conflicto de alta intensidad con China, esta teniendo su impacto en como las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos emplearán sus medios y personal frente a un evento de esta magnitud. En virtud de esto, medios especializados norteamericanos dieron cuenta que el Comando de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (AFSOC) se encuentra evaluando la posibilidad de retirar los cañones de 105mm que equipan a los aviones de ataque AC-130J Ghosthrider. Si bien no se han brindado mayores precisiones, el giro en el foco de las operaciones de las Fuerzas Militares estadounidenses, las cuales estan pasaron de planificar enfrentamientos con adversarios asimétricos, como la insurgencia en el Medio Oriente, hacia aquellos simétricos, como China y Rusia, es una de las principales razones.
Si bien aún no hay mayores detalles, más que presunciones y evaluaciones internas de factibilidad, es preciso destacar que la situación que podrían a travesar los cañoneros AC-130J Ghosthrider es compartida con otros sistema de armas estadounidenses. Lo más reciente, fue la confirmación por parte del Ejército de Estados Unidos de abandonar la modernización SEPv4 de sus tanques M1A2 Abrams, en favor de un nuevo proyecto que beba de las lecciones aprendidas del conflicto entre Ucrania y Rusia.
De este modo, gracias un articulo del medio especializado Defense News, fuentes del AFSOC confirmaron que se está evaluando el retiro de los cañones de 105mm que equipan a los AC-130J, recientemente incorporados desde el año 2016, recibiendo el último en noviembre del año pasado. Fijando una probable fecha de inicio de este proyecto para el año 2026. No brindado mayores datos al respecto.
La situación deja entrever como las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, signadas por más de dos décadas de conflictos armados con fuerzas insurgentes, estan repensando y adaptándose a potenciales conflictos con rivales estatales simétricos, los cuales pueden desembocar en una guerra de alta intensidad. Es decir, en un Teatro de Operaciones plagado de sistemas de defensa aérea de diversos tipos, cazabombarderos de cuarta y quinta generación, misiles hipersónicos y enfrentamiento navales, de superficie aeronavales y submarinos, de magnitud; haciendo que aviones de ataque como los A-10 y AC-130J resulten ineficaces para brindar un apoyo aéreo cercano a tropas terrestres, regulares como especiales, siendo vulnerables el accionar de la aviación enemiga, como de sus sistemas de defensa aérea de corto, medio y largo alcance.
Al respecto, desde AFSOC expresaron a Defense News que: “Para presentar conceptos operativos y tecnologías relevantes en los entornos de competencia estratégica actuales y futuros, el AFSOC está evaluando actualmente las capacidades del AC-130J Ghostrider“. Añadiendo: “El objetivo de esta revisión es mejorar la letalidad, versatilidad y adaptabilidad del AC-130J en una amplia gama de escenarios operativos, garantizando al mismo tiempo que siga siendo un activo vital dentro del AFSOC“.
Con esta apreciación formulada actualmente hacia dentro del Comando de Operaciones Especiales de USAF, se estan evaluando alternativas para, además de retirar a los cañones de 105mm, mejorar las capacidades de los Ghosthrider. Si bien aún en una etapa embrionaria, esta se corresponderían con la adición de nuevos radares AESA para el seguimiento de objetivos terrestres, misiles de crucero, como diversos tipos de armamento stanoff y municiones guiadas.
Sin embargo, todos estos planes hipotéticos deben enfrentarse a la realidades y desafíos de ingenieras sobre los aviones. Ya que el retiro de los cañones de 105mm cambiaría el eje de gravedad de los mismo, debiendo ser cada célula sometida de modificaciones estructurales de envergadura las cuales insumirían millones de dólares. Debiendo además sortear cuestiones burocráticas como la aprobación de los presupuestos a través de los comités del Congreso de los Estados Unidos.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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Honestamente creia que estos estaban fuera de servicio hace tiempo, si removerles el cañon les desbalancea el avion y requiere una inversion entonces tal vez les conviene venderlos a un pais que tenga guerra contra insurgencias.
Contra un enemigo medianamente equipado y formado, es un aparato muy vulnerable. Ya se demostró en la Guerra del Golfo.