El portahelicópteros destructor JS Kaga de la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón ha comenzado sus pruebas de navegación luego de haber pasado por una serie de renovaciones y modificaciones en su cubierta de vuelo que lo asemejan en su nueva disposición a un portaaviones. Así fue revelado por diversos medios locales en las últimas horas.
Conocido como el portahelicópteros destructor más grande que posee la Fuerza Marítima de Autodefensa, el JS Kaga ha salido recientemente de los astilleros en donde se le han realizado una serie de modificaciones para permitir el despegue y aterrizaje de cazas de quinta generación F-35B. En ese sentido, de acuerdo con las imágenes reveladas en las últimas horas, el buque ha cambiado la cubierta de vuelo a una de forma cuadrada y se le han agregado distintas líneas que marcan los lugares de despegue y aterrizaje de las aeronaves.
Las imágenes reveladas el 13 de noviembre muestran al JS Kaga partiendo de la Base Naval Kure de las Fuerzas Marítimas de Autodefensa en la prefectura de Hiroshima, cómo parte de su primera navegación luego de la conversión recibida de su cubierta de vuelo. En ese contexto, el buque ha realizado pruebas de velocidad entre otras actividades.
EL JS Kaga entró en servicio en marzo de 2017 cómo de un buque destinado al despliegue de helicopteros y otra clase de aeronaves. Con una eslora de 248 metros y manga de 38 metros, es el segundo de los portahelicópteros destructores (denominación local) de la clase Izumo, el mayor de las Fuerzas Marítimas de Autodefensa. A finales de 2018, el Gobierno japonés decidió transformar a estos buques en un portaaviones modificándolo para que pudiera operar cazas en su cubierta. Después de eso, se decidió introducir el último caza furtivo F-35B como avión de combate (STOVL) que tiene la capacidad de despegar y aterrizar de manera vertical. Se menciona en medios locales, que la forma que ahora posee el Kaga pasando de una proa cónica a una forma rectangular sería para aumentar la distancia de la cubierta de vuelo para operar más eficientemente a los cazas de quinta generación y reducir las turbulencias.
El gobierno nipón ha argumentado que la razón de la transformación se debe a que son buques multifuncionales que también tienen la capacidad de trabajar con aeronaves de alas fijas. Sin embargo, también se puede entender que debido a los cambios regionales que ha habido en los últimos años, sumado a los cambios de política de defensa de Japón, las Fuerzas Marítimas de Autodefensa necesitan una mayor capacidad para defender y proyectar poder en su litoral marino. En esa linea se puede mencionar la evaluación de desplegar F-35B en la isla de Kyushu.
En cuanto al primer buque y hermano del Kaga, el Izumo, ha completado la primera ronda de renovaciones, incluido el refuerzo de su resistencia al calor y la pintura de sus marcas, y está previsto que comience una segunda ronda de renovaciones a partir del año fiscal 2024, incluido el cambio de la forma de su proa.
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