La campaña de las fuerzas armadas ucranianas por degradar las defensas antiaérea rusas sigue en marcha. En los últimos días se viralizaron una serie videos donde se aprecia la destrucción y daño de algunos de los sistemas que integran en amplio arsenal ruso: desde TELAR Buk M1/M3 y Tor, pasando por un Strela-10 de corto alcance.
La supresión y destrucción de la artillería antiaérea rusa forma parte de las prioridades de los equipos de drones y sistemas de artillería de largo alcance ucranianos, los cuales han logrado perfeccionar el binomio con el paso de los meses. Uno de los sistemas que ha mostrado una notable eficacia para este tipo de tareas han sido los proyectiles GMLRS M30/31 lanzados por los M142 HIMARS y M270 MLRS. Con un alcance que ronda los 70 a 100km, los GMLRS cuentan con un error circular probable de 5 metros, precisión que les permite asegurar la destrucción o daño del objetivo.
En las secuencias recientemente viralizadas en redes sociales se aprecian los ataques a un TELAR Buk-M1 9A310M1, un Buk-M3 9A317M TELARs, un Strela-10 y un TOR. En algunos casos se logra la destrucción del sistema, mientras que los más afortunados aparentan haber recibido algún tipo de daño. Teniendo en cuenta la fragilidad de ciertos componentes, como son las antenas y contenedores de misiles, cualquier avería implica que el sistema quedará fuera de servicio.
Tal como mencionamos, las defensas antiaéreas rusas siguen siendo un objetivo primordial para Ucrania, ya que su supresión y/o destrucción ha permitido abrir brechas temporarias en el dispositivo defensivo, espacios que las fuerzas armadas ucranianas han sabido explotar para realizar ataques de profundidad con municiones merodeadoras de largo alcance y misiles crucero.
Sin embargo, estas victorias ucranianas son unos pasos en una larga marcha ante el formidable sistema de defensa antiaéreo ruso, por lo menos en lo que a cantidades se refiere. Desde el inicio de la invasión en 2022, medios como S-300, S-400, Buk, Tor, entre otros, han demostrado ciertas vulnerabilidades, particularmente contra vehículos aéreos no tripulados, Sin embargo, sus capacidades no han sido subestimadas por la Fuerza Aérea Ucraniana, la cual ha sufrido considerables bajas por acción combinada de la artillería antiaérea y aviación de caza rusa.
Vale recordar que la Fuerza Aérea Ucraniana fue la primera en ingresar en la batalla de supresión y destrucción de precisión de las defensas antiaéreas rusas con la llegada de los misiles anti-radiación AGM-88 HARM, en lo que fue una demostración de adaptabilidad por parte de los ucranianos ya que el misil fue integrado a cazas MiG-29 y Su-27.
Con la llegada de sistemas de artillería de largo alcance y precisión, como los HIMARS, M270/MARS II y proyectiles Excalibur de 155mm, las fuerzas ucranianas fueron puliendo sus tácticas, técnicas y procedimientos para operarlos en combinación con drones. El mencionado binomio logró consolidarse con el paso del tiempo y la experiencia, alcanzando resultados como los recientemente vistos en videos.
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