Con el objetivo de reforzar la presencia y seguridad del Reino Unido en Medio Oriente y aumentar las capacidades de disuasión contra amenazas regionales, el destructor Tipo 45 HMS Diamond de la Real Armada británica fue desplegado en la zona y se unirá a la fragata HMS Lancaster y a los cazaminas presentes en el Golfo Pérsico.
El buque integrará la Operación Kipion, destinada a mantener el flujo de comercio marítimo y asegurar la libertad de navegación en un área que incluye al Golfo Pérsico y se extiende hacia el Océano Índico. Los intentos de evitar una nueva escalada en el conflicto Hamas-Israel y las crecientes ofensivas de los Hutíes en Yemen contra fuerzas occidentales funcionaron como detonantes en la decisión de la Real Armada británica de enviar al HMS Diamond como refuerzo; además, siendo consecuencia de los hechos anteriores, existe gran preocupación entorno a las posibilidades de navegación en puntos estrechos estratégicos en la región.
El Ministro de Defensa del Reino Unido, Grant Shapps, declaró: “Los recientes acontecimientos han demostrado hasta qué punto Oriente Próximo sigue siendo crítico para la seguridad y la estabilidad mundiales (…) El despliegue de hoy reforzará las patrullas de la Royal Navy, ayudará a mantener abiertas las rutas comerciales críticas y demostrará que nuestro compromiso con la seguridad regional no sólo perdura, sino que aumenta”.
Medio Oriente se vio severamente agitado luego de la ofensiva de Hamas contra Israel y el recrudecimiento de la violencia en la zona que disputan árabes y judíos. Las hostilidades tienen la posiblidad de extenderse hacia distintos frentes, no solo por la relación desfavorable entre Israel y algunos vecinos árabes, sino por la influencia de Irán sobre Hamas, los hutíes y otras milicias en los territorios cercanos que combaten continuamente a occidente y sus aliados regionales. Recientemente, y luego de numerosas ofensivas de grupos paramilitares en Siria e Irak contra los Estados Unidos, los hutíes lograron derribar un dron MQ-9 norteamericano en las costas del Mar Rojo; también, hace unos días, este mismo grupo rebelde atacó con drones al buque mercante M/V Unity Explorer.
El despliegue del HMS Diamond continúa con la línea de refuerzos que fueron enviados a Medio Oriente desde Europa y Norteamerica en respuesta a los recientes hechos. Desde los Estados Unidos, por ejemplo, se desplegó el Grupo de Ataque del Portaaviones USS Gerald R. Ford, que incluye al destructor USS Carney, protagonista de varios derribos de sistemas enemigos en la región.
El destructor británico, que recientemente completó tres meses de operaciones con el Carrier Strike Group del Reino Unido, destaca por un armamento consistente en misiles Viper y un cañón principal de 4,5 pulgadas, entre otros sistemas. Puede llevar un helicóptero Wildcat armado con misiles aire-superficie y también transportar un destacamento especializado de los Royal Marines para operaciones de abordaje.
Imágenes de: Royal Navy, Gobierno del Reino Unido y SeaForces.org.
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