Entre los días 4 y el 15 de diciembre, la Fuerza Aérea Turquía desplegó tres cazabombarderos F-4 Phantom a fines de formar parte del Ejercicio Combinado de la OTAN “Poggio Dart 23” (PODA 23) en el noreste de Italia, junto con las Fuerzas Armadas de este país y seis F-16 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF). La actividad fue organizada y coordinada por el Centro de Mando y Control Aéreo Desplegable (DACCC) en Poggio Renatico.
Estos aviones del país euroasiático fueron adquiridos en el año 1974 en el marco del programa Peace Diamond III, y posteriormente modernizados en 1995 con significativas actualizaciones y optimizaciones que incluyeron capacidades de ataque terrestre y lanzamisiles AIM-120 AMRAAM, además de un radar de tiro avanzado ELTA SPS-100 adoptado del IAI Lavi de principios de los años ´90. A partir del año 2006, nuevos proyectos de modernización destinados a prolongar la vida útil del F-4 Phantom se llevaron a cabo.
La participación de las aeronaves turcas en este ejercicio combinado de la OTAN parece confirmar la posibilidad comentada desde el Ministerio de Defensa y Fuerza Aérea de Turquía de mantener en servicio a los F-4 hasta el año 2030, a pesar de diferentes planes propuestos destinados a dejarlos fuera de servicio.
El adiestramiento en el que participaron los F-4 Phantom se llevó a cabo con una fase simulada realizada a través de un ejercicio asistido por ordenador y con vuelos en el espacio aéreo del noroeste de Italia. Desde el centro de Poggio Dart, 30 aeronaves aliadas realizaron aproximadamente 35 salidas diarias a lo largo de la duración del ejercicio. Tanto la agilidad como la rapidez y eficacia del despliegue fueron puestos a prueba.
Poggio Dart 23 fue diseñado para la simulación de escenarios realistas capaces de poner a prueba la adaptabilidad y capacidad de respuesta de las fuerzas de la OTAN. Los medios italianos debieron garantizar una comunicación y cooperación eficientes en el marco de una campaña aérea, contribuyendo a la sincronización de operaciones en aire, tierra y mar. El DACCC, por su parte, mejoró el conocimiento de la situación y facilitó la vigilancia en tiempo real de diferentes entornos para una detección temprana gracias al despliegue de su radar móvil en Cervia.
En este contexto, el General de División Denny Traas, Comandante del DACCC declaró: “PODA23 reunió a participantes de varias naciones miembros de la OTAN, unidos por un objetivo común: mejorar la interoperatividad y demostrar un frente unido frente a los cambiantes retos geopolíticos (…) “Este ejercicio de adiestramiento exhaustivo ha servido como prueba fehaciente del compromiso de la Alianza con la cohesión y la preparación, y ha establecido un estándar notable para las estrategias de defensa en colaboración”.
*Fotografías: NATO Allied Aire Command y Alessandro Fucito.
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Es increíble ver a estos veteranos aún en operaciones.
Y yo que me quejaba de nuestros A4.