Con el objetivo de reconocer mutuamente la certificación en materia de aeronavegabilidad militar, Corea del Sur y Colombia celebraron un acuerdo para la estandarización de reglas y normas de seguridad en vuelo de aeronaves construidas por ambas naciones. Este acuerdo en particular allana el camino para una posible incorporación de aviones de combate ligero KAI FA-50 Fighting Eagle.
Este acuerdo adquiere relevancia considerando la oferta de KAI a la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) de los FA-50 como reemplazo de los A-37B Dragonfly, que fueran retirados en 2021. Cabe destacar que también forma parte de las ofertas analizadas por la FAC el entrenado ligero M-346 de Leonardo. En un segmento superior, como reemplazo de los IAI Kfir, se barajo la incorporación de aviones Lockheed Martin F-16, Eurofighter Typhoon y Saab Gripen.
Cabe destacar que las recientes declaraciones realizadas por el Presidente de Colombia Gustavo Petro respecto a la situación actual de los combates entre Israel y HAMAS han generado un fuerte encontronazo diplomático entre ambos países, lo cual podría afectar la operatividad de los sistemas operados por las Fuerzas Armadas Colombianas de origen Israelí. En particular, los cazas IAI Kfir operados por la FAC, cuyo horizonte de vida previsto hacia 2025 se podría ver verse afectado, motivando a la toma de una decisión respecto a los FA-50, de modo que la FAC no pierda su capacidad de combate con la incorporación de una aeronave que sirva como stop gap.
No obstante, a mediados de 2023 desde el Departamento de Estado de los EE.UU. se dio luz verde para la transferencia permanente de hasta 36 cazas F-16 Fighting Falcon a Colombia. Cabe destacar que Colombia supo evaluar los F-16 Block 10/15 daneses, sin que oficialmente se haya brindado mayor información respecto a continuar con su adquisición en dicha oportunidad.
*Imágenes empleadas a modo de ilustración.
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