El pasado 17 de enero, Irán reveló dos nuevos sistemas de defensa aérea: el sistema de misiles antibalísticos Arman y el sistema de defensa aérea de baja altitud (LAAD) Azarakhsh. Durante la presentación, el Ministro de Defensa iraní, el General de brigada Mohammad Reza Gharaei Ashtiani, afirmó que estos sistemas tienen la capacidad de destruir objetivos en un corto período de tiempo desde su detección y a diversas distancias.
El sistema de misiles Arman se ha desarrollado en dos versiones, una con radar pasivo y otra con radar activo. Utiliza proyectiles de la clase Sayyad 3 de fabricación nacional con la capacidad de lanzar hasta seis de ellos simultáneamente contra objetivos situados a una distancia de 120 a 180 km. El Sayyad es un sistema de misiles de superficie-aire (SAM) de combustible sólido de la versión del Talaash con un nuevo radar, misiles más capaces y otras mejoras. Fue adoptado por las fuerzas iraníes en 2026, y en particular la versión 3 hace referencia a su capacidad de largo alcance.
Por otro lado, el sistema de misiles Azarakhsh puede identificar y destruir objetivos hasta un alcance de 50 km, utilizando cuatro misiles simultáneamente. Este cuenta con sistemas de radar y electroópticos para la detección e interceptación de objetivos, y los misiles utilizados poseen buscadores de calor basados en medios de búsqueda por infrarrojos.
Según informó la agencia oficial IRNA, el objetivo principal de estos sistemas es proteger centros cruciales contra drones y aviones pequeños. Cabe destacar que la presentación de estos sistemas se produce en un contexto regional tenso, con enfrentamientos entre Israel y las fuerzas de Hamas en Gaza, además de las tensiones con Israel relacionadas con el programa nuclear iraní.
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