Durante los primeros días de febrero, nueve pilotos de la Marina Nacional de Francia se unieron al Grupo Aéreo Embarcado del portaaviones Charles de Gaulle para someterse a diversas pruebas de aterrizaje para obtener la habilitación pertinente para operar cazabombarderos embarcados Rafale.
De acuerdo con lo informado por la Marine Nationale, estas calificaciones son parte de la etapa crucial en el proceso de entrenamiento para poder operar las aeronaves de combate embarcadas en el portaaviones como los Rafale M. Previo a ello, los efectivos pertenecientes a la Infantería de Marina y del Ejército del Aire y del Espacio, realizaron numerosos aterrizajes simulados en la pista de la base aérea de Landivisiau. En ese marco, siete calificaron para aterrizaje diurno, uno para nocturno, y otro para diurno y nocturno.
En cuanto a las aeronaves utilizadas, las imágenes publicadas en la gacetilla de prensa de la Marina Nacional muestra a los cazabombarderos Dassault Rafale M, versión embarcada para operar en portaaviones. Estos caza polivalentes de 4,5 generaciones bimotor, y con una configuración de ala en delta y configuración del ala fija tipo canards, cuenta con capacidad de combatir a largo alcance con reabastecimiento en vuelo. En ese sentido, poseen una amplia variedad de misiones que incluyen: defensa y superioridad aérea; penetración y ataque terrestre en todos los climas; ataque en el mar en cualquier clima y desde una distancia; reconocimiento táctico y estratégico; y disuasión nuclear.
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