La Agencia de Suministro de Submarinos del Reino Unido (SDA) adjudicó a la compañía Babcock un contrato valuado en 560 millones de libras esterlinas para el desarrollo de un programa de mantenimiento y prolongación de vida útil del submarino de misiles balisticos HMS Victorious, perteneciente a la clase Vanguard de la Real Armada Británica.

El programa de mantenimiento profundo tiene como finalidad mejorar y modernizar el HMS Victorious, a la vez que se extiende su vida útil; uno de sus objetivos principales consiste en asegurar la continuidad del desarrollo de operaciones de patrullaje marítimo por parte del submarino mas allá del año 2030. Debido al compromiso del Ministerio de Defensa de autorizar trabajos anticipados, ya se están realizando tareas en el vehículo de la clase Vanguard.

Teniendo en cuenta el acuerdo, David Lockwood, Consejero Delegado de Babcock, afirmó: “La ejecución del programa para este activo de defensa vital y complejo es nuestra máxima prioridad. Estamos orgullosos de que se nos haya adjudicado este complejo programa de defensa que utilizará nuestra profunda experiencia en ingeniería para ayudar a mantener la seguridad del Reino Unido”.

Por su parte, el Vicealmirante Martin Connell, Segundo Lord del Mar, declaró: “La Royal Navy no lleva a cabo ninguna misión más importante que la Operación Implacable, las continuas patrullas de disuasión estratégica en el mar que realizan nuestros submarinistas ininterrumpidamente desde 1969 (…) La misión requiere un esfuerzo nacional de apoyo sin precedentes, manteniendo nuestros submarinos de la clase Vanguard con los más altos estándares de ingeniería (…) La revisión del HMS Victorious permitirá al barco llevar a cabo patrullas disuasorias hasta que entre en servicio la próxima generación de submarinos, la clase Dreadnought”.

Los submarinos balísticos nucleares de la clase Vanguard tienen su base en Faslane (Escocia) y, según la Royal Navy, cuentan normalmente con una tripulación de aproximadamente 132 personas. En cuanto al armamento, transportan misiles Trident II D5 y torpedos autoguiados Spearfish.

Lo relativo al mantenimiento de los vehículos de esta clase es particularmente relevante hoy en día, especialmente luego de que haya sido registrado un desperfecto en el medidor de profundidad de uno de los submarinos balísticos. Por cuestiones de seguridad, no se reveló cual de las unidades fue la afectada, pero sí se informó que sufrió un mal funcionamiento en el sistema anteriormente dicho durante la preparación para iniciar un patrullaje portando misiles Trident.

Imágenes de: Royal Navy y Babcock.

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