A través de una serie comunicados oficiales, se dio cuenta que cazas interceptores MiG-31 y bombarderos de largo alcance Tu-22M3 de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas completaron una serie de vuelos de patrulla sobre el Mar Báltico y el Mar Caspio. La particularidad del caso es que el Ministerio de Defensa de la Federación Rusa confirmó además que estos lo hicieron armados con misiles hipersónicos Kh-47M2 Kinzhal.
En su comunicado oficial la Cartera de Defensa rusa indicó que: “Las aeronaves de largo alcance de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas han realizado vuelos programados sobre las aguas internacionales del mar Báltico y del mar Caspio. La misión involucró a los bombarderos de largo alcance Tu-22M3 y a los cazas MiG-31 armados con el sistema lanzado desde el aire Kinzhal. Las tripulaciones de las aeronaves MiG-31 practicaron el reabastecimiento en vuelo“.
Añadiendo: “Todos los vuelos se llevaron a cabo cumpliendo estrictamente con las reglas internacionales de uso del espacio aéreo. Los pilotos de aviación de largo alcance vuelan regularmente sobre las aguas internacionales del Ártico, el Atlántico Norte, el Mar Negro y el Mar Báltico, así como sobre el Océano Pacífico” Además, los mencionados aviones fueron escoltados durante sus respectivos vuelos por otras aeronaves. En detalle, se trató de cazabombarderos Su-30SM y Su-35S.
La realización de estos vuelos de patrulla no corresponde a un hecho aislado, sino que se han registrado con mayor o menor periodicidad en los últimos meses en diversas regiones de Europa como el Báltico. Estas acciones responden a demostrar las capacidades de disuasión de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa y alto grado de alistamiento de sus diversos regimientos de aviación y escuadrones de combate.
En lo referido al armamento desplegados por los MiG-31 y Tu-22M3 se trata del mencionado misil hipersónico Kh-47M2 Kinzhal. Diversas fuentes han informado que el este es una evolución del misil balístico de corto alcance 9K720 Iskander, el cual junto al caza interceptor MiG-31K conforman el sistema de armas 9-A-7760 Kinzhal. Habiendo entrado en servicio a fines de 2017, el misil tendría un alcance de 2.000 kilómetros y sería capaz de alcanzar una velocidad Mach 10. Una vez lanzado, el Kinzhal acelera a velocidad hipersónica a los pocos segundos, sumando la capacidad de maniobrar en todas las fases de la trayectoria de vuelo, lo que lo convierte en una amenaza muy difícil de anular.
El misil hipersónico Kinzhal fue concebido dentro del plan de Moscú para conformar un nuevo arsenal de gran valor estratégico, siendo revelada su existencia en 2018 por el propio Vladimir Putin. Su diseño fue pensado con el fin de atacar objetivos de alto valor, tales como buques de la OTAN que supongan una amenaza para los sistemas de misiles estratégicos rusos, además de los sistemas de defensa antiaérea e infraestructura crítica. El sistema de armas Kinzhal fue inicialmente desplegado en unidades del Distrito Militar Sur, pensado en el teatro de operaciones del Mar Negro y Ucrania.
*Fotografía de portada empleada a modo de ilustración.
