La reciente viralización de un video permitió confirmar que la Fuerza Aérea de Ucrania ya opera sus cazas MiG-29 armados con bombas guiadas AASM entregadas por Francia. Al igual que en otros casos, solo transcurrió muy poco tiempo entre el anuncio de la cesión del armamento a su integración y uso en combate, corroborando una vez más la celeridad con la que se ha trabajado para brindar a Ucrania nuevas capacidades.
La cesión de bombas equipadas con el kit AASM / HAMMER fue comunicada por el presidente Emmanuel Macron a mediados de enero de este año, armamento que integraba un nuevo paquete de ayuda militar junto a misiles crucero SCALP-EG. En su anuncio, el mandatario galo confirmó que Ucrania recibiría varios centenares de kits AASM y bombas de aviación.
La integración de bombas con kit AASM suman un nuevo hito de la Fuerza Aérea de Ucrania y sus aliados, ya que desde el inicio de la nueva invasión rusa, los trabajos en conjunto han permitido que cazas, aviones de ataque y helicópteros de origen soviético puedan operar armamento occidental, tal como ha sido el caso de los misiles anti-radiación AGM-88 HARM, misiles crucero Storm Shadow y SCALP-EG, bombas guiadas JDAM-ER, lanzacohetes Zuni y cohetes Hydra.
El caso de los misiles SCALP EG y Storm Shadow fue destacado por el propio fabricante, ya que en tiempo récord se logró adaptar el binomio (Su-24M). Así lo reconoció oportunamente el CEO de MBDA, Eric Béranger, al mencionar que la compañía pudo trabajar sin limitaciones, lo que se tradujo en resultados en el muy corto plazo, situación que en condiciones normales hubiera demandado varios años.
En cuanto al kit de guiado AASM (Armement Air-Sol Modulaire; Armamento Aire-Suelo Modular), también conocido como HAMMER (Highly Agile Modular Munition Extended Range), sus ventajas se sostienen en las diversas opciones que ofrece para sus sistema de guía (INS/GPS, INS/GPS IR e INS/GPS Láser), así como en la capacidad de extender considerablemente la capacidad stand-off, facilitando que la aeronave lanzadora opere por fuera del alcance de algunos sistemas de defensa antiaérea.
El AASM / HAMMER puede operar con bombas de 250 o 1000kg de la familia Mk, y gracias al kit de aumento de alcance, el mismo ronda entre los 15 a 70 kilómetros (dependiendo de la altitud de la aeronave a la hora de su lanzamiento).
Existe la posibilidad de que las bombas AASM sean integradas tanto en los MiG-29 como en los Su-27, replicando los trabajos realizados con las JDAM-ER. Esto permitirá a la Fuerza Aérea de Ucrania ampliar la cantidad de medios capaces de utilizar el nuevo armamento guiado, los cuales a estas alturas deben ser bastante limitados.
Pese a que la Fuerza Aérea ucraniana recibió al menos 27 MiG-29 provenientes de Polonia y Eslovaquia, la Fuerza lleva perdidas al menos 24 unidades. La situación para la flota de Su-27 debe ser más complicada, ya que la misma no ha recibido refuerzos del extranjero (al menos oficialmente), habiendo sufrido la destrucción de unas 13 aeronaves. Es por esta razón que Ucrania apuesta fuerte a la llegada de los F-16A/B MLU, los cuales elevarán las cantidades de medios y aportarán nuevas capacidades.
Collage de portada: Fuerza Aérea de Ucrania
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