El fabricante francés Dassault Aviation se comprometió a aumentar la producción mensual de 2 a 3 unidades del avión caza Rafale para poder llegar a cumplir con la demanda del Ejército del Aire y Espacio francés que se encuentra en enorme proceso de modernización.
La Dirección General de Armamentos (DGA) comunicó el 12 de enero la compra de 42 nuevos cazas Dassault Rafale F4 adicionales para dotar al Ejército del Aire y Espacio francés como parte de la Ley de Programación Militar (LPM) 2024-2030. Este plan engloba una inversión de aproximadamente 11.000 millones de euros comprendiendo el desarrollo y puesta en servicio de la nueva versión del Rafale, como la fabricación de nuevas aeronaves por parte de Dassault.
Desde Dassault Aviation, su CEO Éric Trappier, vio con optimismo el compromiso generado y remarcó el rol protagónico de la empresa en la defensa de soberanía de Francia: “Estamos listos y decididos a utilizar nuestras habilidades como contratistas principales e integradores de sistemas complejos para servir a la soberanía de nuestra nación. Esta soberanía industrial militar es una excepción en Europa. Garantiza la superioridad de nuestra aviación de combate. También es un activo para la influencia diplomática y una fortaleza económica en el comercio de exportación“.
En cuanto a los nuevos Rafale F4 llegarán a lo largo del 2027. Algunas características de esta versión del caza es la integración de la estación de radio Contact, el misil MICA NG (nueva generación) y el Digital Autónomo Jammer (BAN) integrados en el sistema de autoprotección SPECTRA del Rafale. Además, se expresa que una de las características de este lote es que las aeronaves estarán preparadas para recibir la modernización al estándar F5, actualmente en desarrollo y avizorando su entrada en servicio para la década de 2030.
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