La empresa israelí Rafael ha asegurado los dos primeros clientes para su muy avanzado misil aire-tierra, el Ice Breaker, mientras el sistema de armas aún se encuentra en fases avanzadas de desarrollo. La compañía no revela la identidad de los clientes, pero Zona Militar ha sabido que el sistema de armas está generando gran interés en Europa.
El Ice Breaker es una versión del Rafael Sea Breaker, diseñado para ser lanzado desde tierra y barcos. Según Rafael, el Ice Breaker es un multiplicador de fuerza aérea diseñado para superar los desafíos del campo de batalla moderno a través del legado de soluciones de precisión guiada de alta gama de Rafael. La compañía afirma que el Ice Breaker es resistente a las contramedidas electrónicas y es completamente operativo en entornos negados de GNSS. Rafael dice en un anuncio oficial que el Ice Breaker proporciona capacidades de ataque quirúrgico y de precisión desde distancias de hasta 300 km.
Rafael sostiene que el misil de crucero cuenta con un buscador avanzado de IIR (Infrarrojo de Imagen), ideal para el compromiso de objetivos terrestres y marítimos, ya sean estacionarios o en movimiento, en entornos avanzados de Anti Acceso/Denegación de Área (A2/AD). El comunicado oficial afirma que el Ice Breaker es compatible con varias plataformas aéreas, incluidos aviones de combate, aviones ligeros, helicópteros, y es completamente operativo en todas las condiciones climáticas. El enlace de datos del misil soporta la toma de decisiones en tiempo real y actualizaciones tácticas, con capacidad de aborto en vuelo y evaluación de daños de batalla (BDA).
La compañía dice que el misil fue desarrollado empleando la tecnología única de inteligencia artificial probada en combate de Rafael, aprendizaje profundo y coincidencia de escenas basada en grandes datos, lo que permite la adquisición automática de objetivos (ATA) y el reconocimiento automático de objetivos (ATR). Rafael afirma que el misil vuela a velocidades subsónicas altas y tiene una capacidad de ataque de esfera completa multidireccional y sincronizada, basada en planes de ataque predefinidos, según puntos de referencia, acimut, ángulo de impacto y selección de puntos de mira. Esto, según la empresa israelí, asegura una alta probabilidad de éxito en la misión. El Ice Breaker mide 4 metros de largo y pesa 350 kilogramos, incluyendo una ojiva de penetración, explosión y fragmentación de 113 kilogramos.
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