En el Edificio Libertad, las Armada de Argentina, Brasil y Uruguay llevaron a cabo la ceremonia de clausura del Ejercicio Combinado ACRUX XI, celebrado en aguas del río Paraná. Esta actividad, de carácter bianual, reunió a buques y personal de los mencionados tres países, y contó con la participación de Paraguay como miembro observador. La ceremonia fue presidida por el Contraalmirante Juan Carlos Coré, Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, y contó con la presencia de altas autoridades navales de los países participantes.

Descripción del Ejercicio ACRUX XI

El Ejercicio Acrux XI, que tuvo lugar en la Hidrovía Paraguay-Paraná, es un ejercicio fluvial multinacional diseñado para mejorar el adiestramiento y la coordinación entre las fuerzas navales de la región. Este año, la Armada Argentina actuó como anfitriona, recibiendo a unidades de Brasil y Uruguay en el Apostadero Naval Buenos Aires. Las operaciones, que incluyeron acciones con medios de superficie, aéreos y de Infantería de Marina, se desarrollaron desde el 12 de julio hasta el 24 de julio, involucrando un total de 550 efectivos.

Entre los buques destacados en el ejercicio se encuentra el patrullero ARA “King” (P-21) de la Armada Argentina, un veterano de numerosos ejercicios y operaciones navales. Además, participaron el buque multipropósito ARA “Ciudad de Zárate”, la lancha patrullera ARA “Río Santiago”, y la lancha de instrucción de cadetes ARA “Ciudad de Ensenada”, con la participación del Batallón de Infantería de Marina Nº3 “Almirante Eleazar Videla” de la Armada Argentina, así como efectivos de la Agrupación Buzos Tácticos. Por parte de la Marina de Brasil, estuvieron presentes el navío de apoyo logístico fluvial «Potengi», el “Paraguassu”, el navío patrulla «Piratini» y el buque de asistencia hospitalaria «Tenente Maximiano”. La Armada de Uruguay contribuyó con el guardacostas “Río Negro”, el Guardacostas “Río Yaguaron” y el remolcador “Maldonado”.

Evaluación de las operaciones

En la reunión de crítica de las operaciones, el Contraalmirante Daniel Francisco Finardi destacó la importancia de las coordinaciones previas y el embarco de oficiales de enlace, lo que permitió la realización efectiva de todas las actividades planificadas. Subrayó que la operación ribereña, debido a las características del entorno fluvial, exigió un adiestramiento riguroso en técnicas y tácticas, realizado con un alto grado de realismo y bajo estrictas normas de seguridad.

El Contraalmirante Juan Carlos Coré, por su parte, resaltó cómo el ejercicio fortaleció la cohesión y la capacidad de las dotaciones para operar como una fuerza multinacional en un contexto fluvial. Destacó el profesionalismo y la dedicación del personal naval, que permitió un desempeño eficaz en todas las fases del ejercicio.

La ceremonia culminó con la firma de actas, formalizando el compromiso de la Marina de Brasil para organizar el próximo ejercicio combinado Acrux XII. Además, se realizó un intercambio de presentes entre las delegaciones, simbolizando la amistad y cooperación entre las naciones participantes.

*Créditos de las imágenes: Gaceta Marinera – Armada Argentina

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